El invierno es una gran temporada para plantar hortalizas. Una de las grandes ventajas de cultivar en invierto es que no nos exponemos a las altas temperaturas, y las bajas las podemos controlar por medios artificiales.
¿Qué podemos cultivar en invierno?
Lechugas, Coles, Acelgas, Espinacas e incluso algunas frutas como la frambuesa, son especies ideales para cultivar en invierno, ya que requieren de riego constante y alta protección solar para crecer sanas. Entonces, cuando termine el verano, podemos aprovechar otoño para hacer rotación de cultivos y planear estos cultivos para la temporada de fin de año.
En general todas las verduras de hoja verde, como los berro, la col rizada y las que ya hemos mencionado, debido a su origen mediterráneo, son ideales para cultivar entre el otoño y el invierno.
Otras ventajas de cultivar en invierno.
No se producen lluvias torrenciales que puedan dañar a nuestras plantas.
Las plagas se reducen a niveles mínimos. De hecho, las probabilidades de que una plaga afecte tus cultivos en invierno son prácticamente inexistentes.
Por supuesto, no estamos expuestos al intenso calor.
No debemos preocuparnos por la irrigación a diario. Esta se produce naturalmente y de forma suave y delicada.
Es la estación del año en que la tierra absorbe más fácilmente los nutrientes de forma natural.
Cultivar hortalizas y verduras de hoja verde en invierno es una buena idea. Tus suelos se nutrirán en forma adecuada, lo cual los pondrá a punto, de cara a la llegada de la primavera. Si necesitas asesoría sobre cualquier tema relacionado con la agricultura urbana, no dudes en contactar a un amigo pinchando aquí.
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