¡Helados para todos! El helado vegano se abre hueco en el mercado

Los helados siempre han sido la sensación en todos los lugares del mundo. Sin embargo, no tomaban en cuenta a toda la comunidad y sociedad vegana. Pero, a pesar de eso cuándo la población empezó a tomar conciencia de la necesidad de cuidar el azúcar que ingería, el mundo de los helados tembló, y muchos pensaron que un helado sin azúcar no triunfaría, nada más lejos de la realidad. Estos helados se venden como la espuma ahora y sus sabores no tienen nada que envidiar a los tradicionales. Ahora le llega el momento a una nueva variante: el helado vegano.



Ante un creciente público que demanda productos de origen no animal, este sector se ha visto empujado a reinventarse y dar una oportunidad a un público que, de seguro, no rechazaría un producto refrescante como es un helado en verano, pero si podría rechazar la leche o el huevo que se usa para crearlo

Pero, ¿de qué suele estar hecho un helado?

Los helados tradicionales suelen estar compuestos, en su mayoría, por fruta, a la que se la añade azúcar y agua. Su textura se consigue con leche, derivados lácteos, huevo o miel. Estos últimos son el problema, pues los veganos no los incluyen en su dieta.

Los helados veganos consiguen sustituir estos ingredientes por otros que tenga las mismas propiedades espesantes y estabilizantes como son: la goma de guar, de las habas de una planta de la India; el carragenato, procedente de un alga o la harina de garrofín, obtenida de la semilla del algarrobo.



¿Puede triunfar este helado?

El ya ex presidente de la patronal española de heladeros artesanos, José Luis Gisbert, cree que si. Incluso asegura que este caso le recuerda a otro ya vivido anteriormente.

"Hace 20 años casi no se pedían helados sin azúcar pero empezamos a hacerlos y hoy en día se han convertido en una venta más que notable, con un público consolidado y sin que se note en absoluto la diferencia de gusto con los tradicionales", comentaba Gisbert.

Los helados con sabores frutales se consiguen sin mucha dficultad, no así los que tienen sabor a chocolate, aunque si se consiguen y son más fríos al paladar que los tradicionales. 



Aunque hay sabores que será muy difícil ver con la etiqueta de 'totalmente verde', el mundo vegano está creciendo y debemos recordar que esto no solo beneficia a los veganos, ¿o acaso un helado sin lácteos no suena a una delicia a aquellos que no toleran este producto de origen animal?

Solo el futuro nos dirá el resultado, pero parece que el helado vegano se está abriendo hueco entre las heladerías y pronto será normal ver a gente pidiendo un helado verde sin referirse, esta vez, al color.