No comprendo la muerte, me perturba, ni creo que haya dogma que me haga comprenderla, pero comprendo la vida, que sigue, sin importar si somos humanos o cualquier otro ser. Hoy maté a uno de mis pollitos por accidente, el hijo único de una gallina que compartía nido con otra, en cuanto ella lo vio muerto, fue a darse un baño de polvo y después corrió de nuevo al mismo nido, le quitó un huevo a su vecina y se puso a empollarlo...