Últimos días del 2014

Puedo como la gran mayoría, encerrarme en una burbuja y centrarme en un mundito pequeño, presumiendo lo bueno que fue el año, ungiendo mis palabras de placebos como la familia, éxitos laborales, éxitos académicos, tener, tener y tener etc...pero mi realidad no se basa en tener, sino en ser y ser significa para mi, tener la conciencia de que formamos parte de un algo más grande, que nuestras acciones repercuten en ese algo de de que no podemos vivir desconectados. Mi realidad se compone del entramado ambiental y social en el que todos estamos (consientes o inconsientes).

Por ello creo que el 2014 fue un mal año, lleno de violencia, ignorancia y saqueo de los recursos naturales. El fracking llegó a México y Ayotzinapa se suma a la lista larga de atropellos de lesa humanidad a los que todos estamos sujetos en el país donde vivo. Cada vez se torna más complicado ir contra corriente de un sistema tan fuerte basado en mentiras, fanatismo, dinero y corrupción.

Dudo que 2015 cambie, pero para eso "soy", para cambiar en pequeña escala mi realidad y poco a poco la de toda esa telaraña de situaciones en las que nos tocó luchar. Por nosotros se empieza. Mis mejores deseos, toda la iluminación y apertura de mente para quienes me leen y para la tierra que nos sustenta.