Cientos de discos de pornografía de mujeres indígenas del Occidente están siendo distribuidos en Quetzaltenango, la segunda ciudad más importante de Guatemala.
Este negocio totalmente ilícito ha puesto en alerta a sectores organizados indígenas y la sociedad civil y de derechos humanos, que repudian esta actividad por violar el derecho de las mujeres y porque detrás de estas grabaciones podrían operar bandas de criminales.
Se estima que este tipo de hechos pueda estar involucrado con temas de trata de personas y explotación sexual con fines de lucro, y deben denunciarse. La mayoría de organizaciones de mujeres y derechos humanos creen que las mujeres que aparecen en dichos vídeos podrían ser obligadas o grabadas sin autorización, y hasta pueden existir amenazas de muerte e involucramiento de menores de edad.
Fuente: elquetzaltetco.com
¿Piensan que las mujeres involucradas sienten miedo de denunciar este tipo de atrocidades?