Han sido muchos esfuerzos los que se han hecho durante los últimos diez años para conseguir que el número de niñas afganas escolarizadas aumente de 5.000 a 2,4 millones. Sin embargo, este logro se está desplomando poco a poco, ya que la mayoría tiene que abandonar la escuela a una edad temprana debido a la pobreza, que les obliga a ayudar a sus familias, y a los matrimonios forzados.
A esto hay que añadir la inseguridad cada vez mayor que se está viviendo en el país, debido a la intensificación del conflicto. Ante esta situación, muchas niñas optan por quedarse en casa en lugar de acudir a las clases.
Por otro lado, los países donantes consideran más importante mejorar la situación del país, por lo que la educación cada día está más olvidada, y prueba de ello es el escaso número de profesores y escuelas, y la mala calidad de éstas.
Así pues, no es de extrañar que el porcentaje de mujeres de 18 años escolarizadas no alcance ni el 20%. Es una pena nacer en un país en el que no puedas aprender, culturizarte y desarrollar tu talento. Vivir en Afganistán no es nada fácil, pero mucho menos si se es mujer.
¿Qué opináis sobre estos datos? ¿Creéis que las niñas afganas conseguirán una educación digna?
Foto: El Mundo
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