El número de mujeres localizadas en las redadas el año pasado fue de 6.157. Pero estas eran las "víctimas potenciales". De ellas, sólo una sexta parte (las 1.301) se consideraron después merecedoras de protección. La Policía y la Guardia Civil son los encargados de desentrañar quiénes son efectivamente víctimas. En esta categoría se suele incluir a aquellas que denuncian y a otras que, aunque no lo hagan, presentan signos de haber sido forzadas a la prostitución.
Según los datos, el 95% de las víctimas de 2009 eran mujeres y la mitad tenían entre 23 y 32 años (13 eran menores de edad), y aunque dicen que el 50% eran víctimas extranjeras sin papeles, ninguno de los ministerios implicados ha querido dar el porcentaje del total de las extranjeras quehabía entre las víctimas.
Policía y la Guardia Civil detuvieron el año pasado a 726 personas (el 66% de ellos, hombres): a 412 por delitos de explotación sexual y a 314 por trata de seres humanos. Un incremento del 34% respecto al año anterior.
Ante estas cifras, las ONG piden que se aclaren cuanto antes los requisitos y el protocolo a seguir para que puedan proteger a las víctimas.
"La policía intenta detener a tratantes y eso es legítimo, pero no está considerando a las mujeres explotadas como víctimas de una violación de derechos humanos sino como testigos útiles para un proceso penal. Es un enfoque penal y de inmigración: si la persona no les vale se la quitan de encima y la mandan a su país", dice Waisman, directora ejecutiva de la ONG Women's Link (organización integrada en la Red Española contra la Trata de Persona)
La ONG aboga por que sea personal especializado (policías, pero también psicólogos y trabajadores sociales) los que intervengan en el proceso de identificación de víctimas. "Muchas de estas mujeres vienen de culturas donde una no se debe fiar de la policía y la vía exclusivamente policial las disuade" añade la experta.
¿estamos iendo hacía atrás en materia de trata y explotación sexual?