Esta opción es la de utilizar pinturas murales, con ellas traspasamos los muros y obtenemos una visión de un jardín más abierto.
Foto del Blog de Volga Princess
En la foto anterior tenemos el ejemplo de una pintura mural interior junto a la piscina, el muro se convierte en un paisaje de acantilado donde al final podemos vislumbrar el mar.
Foto de la web Ganden Center Ejea
Esta foto es de la Calle Sepulcro de Zaragoza. Podemos ver en este caso una pintura mural en el exterior de un recinto ajardinado en el que se ha creado una continuidad entre el Monasterio de la Resurrección, la propia calle y la plazuela de San Nicolas.
Podeis ver a continuación un video corto sobre estas pinturas de Zaragoza.
En resumen, nuestro jardín puede traspasar sus límites físicos.