Historia de un canguro y un ouambat

Tengo una amiga que es veterinaria y que, lógicamente, acostumbra a dar 'Me gusta' a muchas publicaciones de páginas sobre animales, en Facebook. Una de las ventajas de la archiconocida red social es que, te enteras 'sin querer' o sin darte cuenta, mejor dicho, de circunstancias que, de otra manera, seguramente se te habrían escapado. Así que, enseguida, he tomado riendas y he curioseado la fanpage de National Geographic, meca de las publicaciones y fotografías sobre animales, a nivel mundial. 

La verdad es que hay una foto que, en concreto, me ha impactado.  Y eso que no soy muy dada a leer este medios, pero es tan tierna...Más aún, me ha 'tocado' cuando he advertido que se trata de una situación que se da en un centro de recuperación animal, concretamente, en uno de Australia.

En ella, aparecen un canguro muy joven y este otro animal, llamado ouambat, en actitud protectora recíprocamente. Maravilloso todo lo que puede transmitirnos un animal con sólo un gesto, hacia otro de sus congéneres ¿no creéis? Ambos, enfermos, esperan pronto volver a su habitat. Pero mientras, ahí están, consolándose mutuamente.

¿No es de lo más tierno que habéis visto hoy?



Los centros de recuperación animal, constituyen una grandísima aportación al mantenimiento del ecosistema. En ellos, ciertas especies y animales, en peligro o no de extinción, son tratados y cuidados con sofisticados sistemas de veterinaria y medicina animal y atendidos según sus necesidades y condiciones específicas.

Aunque en España, en este sentido el tema ha evolucionado mucho desde los años 70, aun 'queda camino por recorrer'. Importantísima labor a nuestra fauna ibérica han realizado los profesionales y voluntarios de estos centros, principalmente situados en el norte del país. En España, señalamos el primer centro de recuperación de fauna silvestre, en 1979 creado en Martiola, Araba. 

Foto. National Geographic.