Hoy 24 de junio, reconocido a nivel nacional como el Día del Campesino/a, el Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán saluda a los campesinos y campesinas que trabajan día a día en el campo. Hacemos un reconocimiento especial al rol fundamental que cumplen las mujeres campesinas en el desarrollo de nuestro país, en la seguridad alimentaria, como transformadoras y conservadoras de la biodiversidad y el cuidado del medio ambiente.
En nuestro país, 7 de cada 10 toneladas de productos agrícolas y de alimentos son producidos por la pequeña agricultura y economía campesina. A pesar de este dato, que comprueba el aporte del agro a la economía nacional, el Estado invierte en el sector agrario menos del 1%, lo que se expresa en la postergación de este sector y que cerca del 70% de la población en zonas rurales se encuentre en situación de pobreza, la que afecta especialmente a las mujeres.
El 20.3% de las unidades agropecuarias son dirigidas por mujeres. Sin embargo, solo el 4.7% de las productoras rurales cuenta con un título de propiedad debidamente registrado. Y esto, sobre todo, debido a que carecen de documentos de identidad y la ausencia de políticas y de sensibilización de los funcionarios públicos frente a las necesidades de las mujeres del campo.
Ante este panorama, demandamos al Estado dar respuesta a la deuda histórica que mantiene con el agro, implementando políticas integrales e inclusivas que promuevan el desarrollo de las poblaciones rurales, campesinas, indígenas y amazónicas.
En el marco de esta fecha y ante la reciente decisión del Poder Ejecutivo de no aprobar la Ley sobre el Derecho de Consulta a los Pueblos Indígenas, hacemos un llamado urgente al Gobierno y al Congreso para que resuelvan las observaciones y se proceda a su aprobación inmediata, como un símbolo de respeto, reconocimiento y visibilización de los derechos de los pueblos indígenas de nuestro país.
Asimismo, demandamos al Estado que implemente medidas orientadas a mejorar la situación y condición de las mujeres, garantizando su derecho a la identidad y al nombre para el acceso y ejercicio de sus derechos fundamentales; la implementación de medidas para la prevención y mitigación frente al cambio climático; y el reconocimiento de las mujeres campesinas como productoras agrarias que contribuyen activamente a la seguridad alimentaria, al desarrollo de sus regiones y de nuestro país.
Lima, 24 de junio del 2010