Decisión que no gusto al gigante francés de la publicidad callejera JcDecaux, pero el alcalde de Gernoble entiende que es más importante para la ciudad un árbol que un cartel publicitario, y declaro que con esta medida tratan de conseguir una ciudad menos estresante y con una identidad propia que prime la gente y la calidad de vida.
El librar a la ciudad de vallas publicitarias es una primera medida, en conjunto con otras como mejorar la red de cilcovías y el sistema de recogida selectiva de basura, con el claro objetivo de convertir a Gernoble en una de las ciudades más verdes de Europa.