Con la necesidad de catalogar este tipo de alimentos y de verificar y evitar posibles estafas en cuanto a su denominación, desde el año 2005 existe una normativa europea que se encarga de proteger este tipo de artículos, donde entran todos los denominados: ecológicos, eco, bio, biológico, org y orgánico. Los productos ecológicos van protegidos con este sello, común para toda la Unión Europea:
No obstante, esta regulación lo único que hace es no permitir que productos no ecológicos 'mientan' al consumidor haciéndole creer que los son, pero ¿quiénes lo regulan en realidad? Esta competencia, en España, recae sobre las comunidades autónomas que son las encargadas de otorgar los diversos sellos ecológicos a los productos ecológicos y garantizar así la producción totalmente ecológica, que ha debido pasar para la obtención de este etiquetado por unos rigurosos controles de calidad que marcan unos estándares prefijados por la Unión Europea.
Encontramos dos tipos de etiquetado, que varían según el origen del producto:
¿Y qué quiere decir que los artículos que compremos dispongan de este tipo de sellos? Entre otras cuestiones, que en su procesado agrícola no hayan sido tratados ni con transgénicos ni con ningún tipo de fertilizante ni producto químico. Es decir, que el proceso haya sido lo más natural posible. Para controlar todo esto, las explotaciones con este tipo de certificación, son vigiladas una vez al año para corroborar que se cumple con la normativa para poder mostrar este etiquetado en su producción.
No obstante, el siguiente paso en cuanto a certificación tendría que venir de productos que aseguren la menor huella ecológica posible, y un procesado 100% ecológico.
Y vosotros, ¿consumís alimentos procedentes de agricultura ecológica?