Warka Water es un proyecto que ha sido desarrollado por el arquitecto Arturio Vittori desde el 2012, con el fin de proporcionar agua potable a poblaciones rurales, por medio de una estructura construida con materiales reciclables. A principios de 2015 fue instalada la primera torre en un poblado de Etiopía, la cual cumplió con su cometido exitosamente y demostró ser una alternativa completamente viable para países de bajos recursos y que se encuentren inmersos en la escasez de agua.
Desde hace un tiempo, Vittori y su equipo han desarrollado 7 versiones distintas de la estructura. Siendo la última, según su página web oficial, la más apta para recolectar agua y distribuirla entre los habitantes del poblado a surtir. Al día de hoy han logrado construir 12 prototipos en tamaño real, distribuidos en países como Etiopía, Camerún, Haití y Togo.
¿Cómo funciona la torre Warka Water?
El dispositivo funciona como una especie de “malla recolectora de rocío”. Que permite cosechar el vapor contenido en el aire. El único problema que presenta es que aún depende de las condiciones de humedad y temperatura del entorno. Pero el equipo de Warka Water asegura que su diseño, le permite “producir” agua del aire en casi cualquier parte del mundo, ya que lograron encontrar un mecanismo óptimo para minimizar esta dependencia.
El trabajo de la estructura se puede dividir en tres etapas, la primera de recolección, una segunda de filtración y guardado; y la tercera de distribución. El diseño de la malla permite que el agua se adhiera al artefacto, y fluya hacia un tanque de almacenamiento que filtra y permite la distribución del fluido vital entre la comunidad. Además, posee un área común donde las personas pueden interactuar bajo la fresca sombra en épocas muy cálidas.
A pesar de funcionar bajo la influencia ambiental, ésta parece ser una de las soluciones más innovadoras en la lucha contra la desigualdad social y la deficiente distribución de recursos. Creemos que es del conocimiento de todos vosotros que el acceso de agua potable está restringido en numerosas partes del mundo, y este proyecto permite cosechar, dependiendo de las condiciones meteorológicas, entre 40 y 80 litros (10 a 20 galones) de agua diarios, a completa disposición de la comunidad, lo cual implica una acción gigante para poblaciones donde el agua es prácticamente inexistente.
Transformación del aire en agua
Por otra parte, además del vapor de agua, la estructura colecta condensación atmosférica, lo que incluye lluvia y neblina, gracias a que su funcionamiento se basa en tres factores principales: gravedad, evaporación y condensación. Los cuales si bien aprendimos de las clases del colegio, son los que dan lugar al ciclo natural del agua.
Recordemos que en el ciclo hidrológico, el agua es evaporada por la luz solar, luego es condensada en las nubes o en el ambiente, y posteriormente es precipitada gracias a la gravedad, cuando la cantidad de líquido sobresatura el ambiente.
Warka Water como solución a los problemas de desigualdad en la distribución del agua
Podemos observar que la torre Warka Water es un artefacto 100% ecológico, que no depende de la electricidad, y además, gracias a la política que maneja su grupo de trabajo, cada estructura debe ser creada con materiales originarios de la zona, y por las personas de la comunidad en donde será instalada a modo de abaratar costos y por supuesto, garantizar su durabilidad.
En vista de que son los habitantes de los poblados los responsables del mantenimiento de la torre, se facilita así el éxito y viabilidad del proyecto. Además, permite la generación de nuevos empleos para la comunidad, educación ambiental, y motiva el aprendizaje científico mediante su forma de trabajo.
Sin embargo, además de esta torre, existen 6 proyectos más por parte de la compañía, que se desenvuelven en ámbitos de gran preocupación social; incluyendo la sanitización de aguas negras, jardines ecológicos auto-sustentables, e incluso artefactos para proveer energía a partir de paneles solares.
Sin duda es un proyecto maravilloso que se encuentra dando un giro al mundo y que vale la pena conocer y apoyar. En estos tiempos de crisis lo mejor es apoyarnos y permanecer unidos. No os dejéis caer, y mantengamos el ánimo en alta. Al final del túnel siempre encontraréis la luz.
Autor:
Claudia V. Barrios A | Especialista en Astrofísica
Redactor