El Castor: Perfecto Arquitecto y Constructor de la Naturaleza

Sabías que; Los Castores son conocidos por construir eficientes diques, pues sí estos pequeños mamíferos poseen esta habilidad natural y para la construcción de sus diques en ríos y arroyos utilizan principalmente los troncos de los árboles que derriban con sus poderosos incisivos, pero a pesar de la gran cantidad de árboles que talan, no suelen causar daños en los ecosistemas en que viven, por el contrario los mantienen saludable, pues sus diques proveen una gran cantidad de beneficios.

Entre los más importantes beneficios de los diques podemos mencionar, que contribuyen a la creación de humedales, ayudan a controlar las inundaciones y eliminan contaminantes de las corrientes, sin embargo en ecosistemas extraños para ellos estas modificaciones al ambiente pueden ser perjudiciales, como ha sucedido por ejemplo en lugares como Tierra del Fuego y en las comunidades españolas de Navarra y La Rioja, luego de introducir esta especie.





En el estanque creado construyen sus madrigueras, durante la construcción el lodo o fango lo colocan con sus patas delanteras y no con su cola, como comúnmente se cree, pues esta es utilizada únicamente como timón cuando nadan y para mantenerse en pie cuando se paran en sus patas traseras. Estas construcciones las realizan casi siempre por la noche, transportando el lodo y piedras con sus patas delanteras y los troncos con sus dientes, y al nadar se impulsan con sus extremidades posteriores que siempre permanecen sumergidas, asomando fuera del agua únicamente su cabeza para poder respirar y ver el entorno.

Poco antes de la llegada del invierno cubren sus madrigueras con lodo, una vez que bajan las temperaturas este se convierte en hielo tan duro como una roca, lo que les protege de sus depredadores durante su invernación, de la misma forma realizan reparaciones tanto al dique como a su madriguera y recolectan suficiente comida y madera para pasar el invierno.





Realmente es genial lo que realizan los castores por puro instinto, nos demuestra una vez la perfección de la naturaleza, donde todo encaja, tiene su razón de ser y no hay lugar para errores, genial por los castores.