Mi forma de vivir y de sentir cada cosa que hago, depende mucho del mar.
La percepción de La Naturaleza para mi está vinculada al mar en todos los sentidos.
Aquí tenemos unos prados de un verde intenso, unos bosques centenarios que en cada temporada cambian de color, de aroma y hasta de forma, unos ríos que aparecen y desaparecen a su antojo por toda la geografía y frente a todo esto... un inmenso mar que todo y a todos nos contempla.
El mar da vida tando a la fauna como a la flora y entre sus aguas disfrutamos de su inmesidad con pasión, pero sobre todo con respeto.
El respeto por el mar es algo que muchos pasan por alto y de vez en cuando Poseidón da una pequeña lección de humildad, para que no se nos olvide lo insignificantes que somos entre sus brazos.
Hay que disfrutar de su fuerza sin miedo pero con respeto.