Hojas impresas con detalles, revistas viejas, cartones para los huevos, recipientes vacíos para jugos o leche, envases de vidrio o plástico para alimentos de bebés, rollos de papel sanitario, entre otros, pueden ser reutilizados en casa para sacarles así mayor provecho.
Repasemos 6 posibles ideas sobre lo que podemos hacer con estos:
#1. Hojas impresas
Nunca faltan hojas impresas con detalles que sin medir consecuencias arrugamos y desechamos, estas son útiles para crear una mini-libreta de anotaciones, si las cortamos en cuadros más pequeños, le colocamos un clip o engrapamos. Podemos emplearlas por el reverso sin uso y apuntar borradores de ideas. Son propicias para tenerlas cerca de la mesa del teléfono de casa; si llaman del banco y nos brindan una información de interés, no tendremos que dar vueltas por todo el recinto con la llamada en espera mientras vemos dónde anotar o en el peor de los casos, al modo “ex presidiario” hacerlo en la palma de la mano.
Es el mejor recurso cuando tus hijos quieran colorear pues evitamos darles hojas nuevas o que rayen las paredes.
#2. Revistas-periódicos viejos
No obstante de ser contraindicados por sus facultades para atraer roedores, es provechoso tener algunos ejemplares en casa para las asignaciones de los niños como pintar con acuarelas, empleándolos así como base para evitar manchar las superficies en las cuales trabajan. Son usados cuando vamos a pintar alguna pared y queremos evitar dejar en el piso unas manchas.
Las revistas son muy coloridas, valiosas para la escuela donde es común practicar el recortar, el rasgado y aprendizaje de las vocales. Muy prácticas si no tienes recursos para forrar cajas, cuadernos y útiles escolares. Quizás te cause risa, pero no hay nada más terrible que no contar con una hoja de revista o periódico viejo cuando te regalan un “aguacate” y lo quieres pronto madurar.
#3. Los cartones para colocar los huevos
Son perfectos aislantes. Sabemos que es una propuesta antiestética, pero de esto no se trata este artículo, así que en esas ventanas donde se filtren muchos ruidos puede hacer uso de estos y ese sonido disminuirá. Aprovéchalos como pequeños materitos y para infinidades de trabajos manuales. Si son los plásticos, son buenos como depósitos de acuarelas o temperas para que tus hijos trabajen.
#4. Los recipientes plásticos para jugos o leche
Una vez limpios, sirven para almacenar agua. Si los cortas y decoras puedes sembrar algunas semillas.
#5. Los frascos o envases de vidrios
Los de compotas son útiles cuando comes en la oficina y no tienes donde llevar tu aderezo. En estos puedes apartar un poco de pegamento para ser empleado por tus hijos en la escuela, guardar botones, clip, grapas, chinches, hasta zarcillos, en los más grandes, apartar porciones de alimentos.
#6. Papel sanitario
¿Nunca te has hecho los rollos en la cabeza con un tubo de estos? Pues son fantásticos si gustas de unas amplias ondas, solo requieren de unos ganchos negros para sujetar. Positivos para guardar marcadores, lápices y colores dispuestos sobre una base tanto de manera vertical como horizontal.
Fuente: este post proviene de Magazine Organizarte, donde puedes consultar el contenido original.
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