En España se cree en la eficacia de estos chequeos, ya que en Cantabria durante dos años se ha hecho esta pregunta a todas las mujeres, de lo que se ha podido concluir que en el 22% de los casos no se sospechaba que existiera violencia doméstica.
Sin embargo, algunos profesionales consideran que los sanitarios se muestran reticentes a llevar a cabo esta iniciativa, entre otras cosas, por el miedo a ofender a la mujer haciéndoles semejante pregunta.
¿Qué opináis vosotras? ¿Creéis que este sistema ayudaría a reducir el número de mujeres víctimas de la violencia de género?
Foto e información: El Mundo