1- Agua del fregadero:
Cuando queremos agua caliente hasta que deja de salir agua fria, podemos recoger este agua fría que normalmente dejamos que vaya al desagüe.
También podemos recoger el agua que utilizamos para que los vasos o platos sucios no se resequen antes de fregarlos o llevarlos al lavaplatos. Este agua está llena de materia orgánica, así que al regar con ella también aportamos a la tierra de las macetas o de nuestro jardín muchos nutrientes.
2- Agua de la ducha:
Como en el anterior caso, cuando queremos agua caliente hasta que deja de salir agua fria, podemos recoger este agua fría que normalmente dejamos que vaya al desagüe.
3- Agua desechada de aparatos de aire acondicionado:
Este agua también la podemos utilizar para regar, aunque no recomiendo hacerlo directamente pues se trata de una agua destilada. Yo recomiendo mezclarla con otras aguas domésticas descritas o bien añadirle abono líquido.
De esta forma haciendo un cálculo apróximado, para una familia de cuatro personas podríamos obtener para riego al día, al menos entre 6 y 15 litros de agua.
¿Quién dice que tener plantas sube la factura del agua?.