Todo empezó cuando estábamos de paseo en la bahía de Santander, con el barco y unos amigos, los cuales os invito a que visitéis su blog aquí. Al pasar cerca de la boya cuatro (Ría de Cubas) de la bahía pudimos ver un alcatraz (de tercer año) relativamente cerca de la costa. Al acercarnos pudimos observar que tenía un trozo de cuerda al rededor del pico. Dejo a continuación algunas fotos.
Al analizar el problema, nos dimos cuenta que está algo débil (cuando nos acercamos se asustaba pero no hechaba a volar) y que estaba en malas condiciones debido a la incapacidad de obtener alimento que le había ocasionado la cuerda. Llamamos al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de Cantabria (942 564 944 ó 690 634 320) pero ya habían cerrado. A falta de información de qué hacer en este caso, decidimos actuar. Nos acercamos al ave (algo que no nos resultó fácil) y con una sacadera (una especie de red con un mango, que se utiliza para subir a cubierta los peces recién pescados) intentamos subirle al barco.
Dejo a continuación algunas fotos,
Cogiendo al alcatraz con el redeño.
Como se movía bastante, intentamos quitarle la cuerda por un lado del la borda.
Al final se soltó y tuvimos que volver a cogerle. Dejo un vídeo bastante interesante de como lo recogimos.
Ya a bordo, le quitamos el trozo de cuerda restante y como estaba agotado, prefirió quedarse en la punta del barco descansando.
Después de haber merendado en El Puntal, ya era hora de ir para casa. Después de llamar a Nacho (de SEO Cantabria) y pensar que íbamos a hacer con el alcatraz (ya que seguía dormido en la punta del barco), decidimos salir hasta donde está la Isla de Moira y allí que, al ver el mar abierto, hechase a volar.
Cuando llegamos al sitio, ya se había despertado pero no tenía intención alguna en hechar a volar. Barajamos la posibilidad de ir al puerto y que pasase la noche allí para que mañana por la mañana, le llevásemos al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de Cantabria. Pero cabía la posiblidad de que alguien le hiciera daño o que hechara a volar y se perdiera (el puesto de Ramos está ya bastante metido en la ría del Mera).
Finalmente, decidimos empujarle suavemente hacia el agua ya que no tenía intención de volar; posiblemente debido a que, como era un alcatraz de tercer año, pues no subía despegar desde tierra (los alcatraces normalmente despegan desde el agua).
Ya en el agua, se fue felizmente nadando mar adentro, en dirección al Norte.
-Me gustaría animar a todos aquellos que encuentren un animal en peligro, malas condiciones o que necesite ayuda; a llevarlo a un centro de recuperación o hacer algo para que se encuentre mejor, en muchos casos podrás salvar su vida.
Muchas gracias por leer esta entrada, algo diferente a las que suelo hacer, y espero que te haya gustado.
¿Alguna vez has estado en alguna situación similar? ¿cual es la parte de esta entrada que te ha parecido más "peculiar"? ¡¡Cuéntamelo en los comentarios!!