Piénsalo! ¿Dónde estuvieron hoy tus zapatos?
Atravesaste por el parque camino del trabajo, ese parque que rocían con herbicidas para controlar “las malas hierbas” o con fertilizantes químicos o plaguicidas…. fuiste a la gasolinera, un baño público de un lugar cualquiera, las aceras de cualquier calle….
Te lo adelantaba en este post, pero tus zapatos al final del día tienen contacto directo con infinidad de cosas.
¿QUÉ TRAEN LAS SUELAS DE TUS ZAPATOS CUANDO LLEGAS A CASA?
Bacterias desagradables
Investigaciones recientes han descubierto que el suelo de un baño público, por ejemplo puede tener millones de bacterias, algunas de ellas peligrosas como la e-coli que permanecen en las suelas de los zapatos y se pueden acabar transfiriendo al suelo de tu casa.
Residuos tóxicos y pesticidas
Residuos tóxicos y peligrosos pesticidas se pueden encontrar en todas partes y mas, mientras los ayuntamientos no sean conscientes del peligro que supone su uso indiscriminado. Afortunadamente cada vez son más los que dan un paso al frente para proteger la salud de la población.
Metales pesados
La Agencia de Protección Ambiental (EPA) encontró también metales pesados como plomo muy presente durante muchas décadas en materiales de construcción y prohibido actualmente por su extrema toxicidad, pero presente por tanto, en algo tan común como las reformas.
Que no cunda el pánico!!
La probabilidad de que las bacterias y microorganismos que llegan en la suela de tus zapatos te infecte directamente es muy baja, pero juega en tu contra, si tu sistema de defensas está débil.
Limpiar los zapatos en el felpudo al entrar, ya reduce considerablemente la cantidad de suciedad transportada. Pero, la mejor solución es quitarse los zapatos nada mas llegar. El suelo permanecerá limpio y reducimos drásticamente que posibles amenazas tóxicas entren en contacto con las alfombras..
¡¡¡CUIDADO si hay niños o bebés en casa!!!.
Se pasan el día arrastrándose por el suelo y llevándose las manos a la boca. Dejando los zapatos en la entrada evitamos que puedan enfermarse o al menos no cargamos más la mochila tóxica, que tarde o temprano pasará factura.
Al fin y al cabo, caminar en zapatillas, calcetines o descalzo nos ayuda a relajarnos y descansar.
Y a nivel energético también podríamos decir que
“no introduces en casa lo que te traes de fuera“
¿Qué te parece adquirir el hábito sano de quitarte los zapatos nada mas llegues a casa? ¿Te descalzas?
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Fuente: este post proviene de Casa que suma, donde puedes consultar el contenido original.
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