Si bien creemos que el uso de esta planta está absurdamente “demonizado”, ya que mientras que por un lado se persigue y criminaliza su uso en muchos lugares, por otro se fomenta el tabaquismo con campañas publicitarias y el alcoholismo, con la proliferación de bares y festivales, y también con una publicidad omnipresente.
No se trata de una cuestión moral, sino más bien de la doble moral: la marihuana tiene muchos efectos positivos para la salud, mientras que el tabaco y el alcohol prácticamente carecen de efectos positivos y están relacionados con un montón de problemas: enfermedades cardiovasculares, alcoholismo, cirrosis, cáncer de pulmón y otras patología respiratorias, accidentes de tránsito, violencia doméstica, y un enorme y triste etcétera).
Una cosa muy buena es que en la actualidad podemos fácilmente sembrar nuestras plantas con semillas autoflorecientes, las cuales florecen más allá de las horas de luz a las que estén expuestas, y nos dejan margen para que nos dediquemos mejor a su cuidado.
Es bueno tener en cuenta que si bien en algunos lugares su uso para autoconsumo sigue siendo perseguido, en algunos lugares como España, por ejemplo, se han dado importantes pasos y desde el año 2015 se permite legalmente autocultivar hasta 6 plantas de marihuana para uso medicinal o recreativo. Esta cantidad es por cada domicilio, independientemente del número de personas que vivan en la casa o que vayan a utilizar las plantas.
Tratar el glaucoma
Uno de los usos menos conocidos de la marihuana medicinal es para tratar un problema grave de la vista y ocular, el glaucoma, ya que ha demostrado ser muy efectiva para tratar y prevenir esta dolencia.El glaucoma no es una enfermedad sino un conjunto de afecciones oculares que dañan el nervio óptico, con la correspondiente consecuencia de la pérdida de la buena visión y que pueden llevar a la pérdida total de la misma. Suele aparecer en personas mayores, pero no solo, y su origen es a causa del exceso de presión del globo ocular mayor que lo normal.
Estimular el apetito
Este uso de la marihuana está más extendido, y es efectivo en personas con anorexia y otro tipo de trastornos alimentarios, pero también en pacientes de SIDA y cáncer, ya que debido a los fuertes tratamientos muchas veces acaban perdiendo el apetito, así como en pacientes con Alzheimer y enfermedades pulmonares.El THC, administrado en cantidades entre 5 y 20 mg diarios ha demostrado ser muy efectivo en todos estos casos.
Calmar el dolor
El uso de la marihuana para calmar el dolor está sobradamente comprobado. Muchos pacientes con enfermedades graves o crónicas utilizan la marihuana u otros productos a base de cannabis (como el aceite de CBD, el cual también se extrae de la marihuana) para calmar los dolores.Se trata de un analgésico potente, ya que tanto el THC como el CBD son muy efectivos en el tratamiento de todo tipo de dolores.
Marihuana para dormir
La marihuana contiene, o al menos hasta el momento han sido identificados, 70 tipos distintos de fitocannabinoides, dos de los cuales ayudan dormir mejor y a combatir el insomnio.Se trata de dos de los que tienen efectos sedantes, el tetrahidrocannabinol y el cannabidiol. Estos cannabinoides proporcionan un efecto relajante tanto a nivel físico como mental que ayudan a combatir los trastornos de sueño de manera muy efectiva.
Tratamiento de la epilepsia
Uno de los componentes cannabinoides de la marihuana es el cannabidiol o CBD, se trata de uno de los componentes que más están siendo utilizados en medicina alternativa, a través de los múltiples productos.El CBD se está utilizando para tratar la epilepsia infantil, pero también está demostrado que el uso de la marihuana en pacientes adultos y fumada, ha demostrado grandes mejoras en los síntomas de la epilepsia, además de tener muchos menos efectos secundarios que los los productos farmacológicos utilizados para tratar esta enfermedad.
Trastornos neurodegenerativos
Se ha demostrado en infinidad de estudios que tanto el Parkinson como el Alzheimer, los dos trastornos neurodegenerativos más comunes entre las personas de más de 60 años y que afectan al sistema nervioso central de manera crónica, progresiva e invalidante, pueden ser tratados o ralentizados con la marihuana.Tratamientos del cáncer
Las personas que están bajo tratamiento contra el cáncer, principalmente quimioterapia, padecen muchos efectos secundarios, entre los que se encuentran las náuseas, los vómitos y el malestar en general, además de la pérdida de apetito.Tanto fumar como consumir productos con THC, siempre según estudios científicos, ayuda a muchos pacientes a mejorar el apetito y el malestar propio de este agresivo pero en muchas ocasiones inevitable tratamiento.
Estos son algunos de los usos más comunes de la marihuana medicinal. Hay muchos más, y tantos otros están siendo investigados y poco a poco científicamente validados. Es importante quitarse los prejuicios contra esta planta, considerada sagrada incluso en algunas culturas, y dejar de asociarla con drogas dañinas como la heroína o la cocaína, con las que no comparte prácticamente nada.
¿Qué otros usos de la marihuana medicinal conoces? Déjalo en los comentarios. Tu aporte nos ayudará a seguir aprendiendo y descubriendo los amplios usos de esta planta.
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