Desde hace años, África se encuentra en crisis y son varios los factores que juegan un papel fundamental en esta situación, desde la pobreza hasta el cambio climático o los conflictos. El continente africano es posiblemente uno de los lugares más desprotegidos y que más sufre el cambio climático y sus consecuencias. La actividad humana se combina con este problema ambiental generando situaciones extremas en la población como la desnutrición.
El 33% de la población en la zona sur de África está desnutrida y en África central las cifras de desnutrición alcanzan al 55% de la población total. Al año se producen 20 periodos de emergencia alimentaria, las región más afectada de África es el Sahel. Pero, ¿cuáles son los grupos de población más afectados? Las tribus y poblaciones rurales, así como las mujeres son los sujetos más vulnerables ante esta situación de crisis.
Cambio climático
Los fenómenos más comunes en África son las inundaciones y las sequías. Las inundaciones son un fenómeno recurrente en la zona norte del continente, por ejemplo, en el año 2000 tuvo lugar una inundación en Mozambique que terminó con la vida de 800 personas, además las tierras de cultivo acabaron destrozadas y sin posibilidad de recuperación. Destacar que de la población afectada por la inundación, 1 millón de personas necesitaban las tierras de cultivo para alimentarse.Las sequías son el segundo fenómeno meteorológico más recurrente en África. Se dan siempre en la temporada de verano y afectan en especial a las zonas central y este de África. La peor sequía hasta la historia se dio entre el año 2011 y 2012. El proceso de desertificación en África avanza a un ritmo vertiginoso, se calcula que cada año avanza un 3'5%.
Cada vez más, el nivel del agua en los ríos africanos va disminuyendo y en muchas ocasiones los ríos terminan incluso secándose. Por ejemplo, Malí depende al 100% del río Níger para el abastecimiento de agua, la alimentación y el transporte.
Sin embargo, como consecuencia del cambio climático, partes del río se han secado, lo que ha causado que grandes grupos de población estén luchando contra la desnutrición. Se calcula que si las temperaturas siguen aumentando y los recursos naturales desapareciendo, la desnutrición afecte a 65 millones de africanos más.
La fuente de muchos ríos son los glaciares del Monte Kilimanjaro, pero estos están desapareciendo. El 82% del hielo que cubría dicha montaña ha desaparecido lo que ha ocasionado que muchos ríos se sequen. El exceso de calor ha generado que los paisajes africanos cambien y se ha plasmado en la desaparición de las tierras de cultivo. Hay una escasez notable de precipitaciones y la agricultura africana necesita la lluvia para sobrevivir.
Los países que forman el continente africano destacan por ser pobres y carecer de los recursos necesarios para hacer frente a enfermedades causadas por el clima. Debido la aumento considerable de la temperatura, las insolaciones son muy frecuentes en la población. Los africanos, en su mayoría, padecen enfermedades respiratorias graves consecuencia de la baja calidad del aire y las altas temperaturas.
La desnutrición es la enfermedad más común en África y la causa de la mayoría de muertes, sobre todo infantiles. Además, esta enfermedad contribuye a potenciar la situación de pobreza del continente. Otra enfermedad generada por el cambio climático es la Malaria, las inundaciones y las altas temperaturas causan que esta enfermedad se propague.
El número de refugiados ha aumentado porque los desastres naturales hacen que no puedan utilizar sus hogares. Según datos de Médicos Sin Fronteras, Naciones Unidas ha refugiado a más de 100.000 personas en campamentos situados en el sur de Sudán.
Destacar que los ecosistemas en África se han visto muy afectados, lo que ha generado un cambio en el número de especies animales y vegetales. Decir que de todos los continentes, África es que menos ha contribuido al cambio climático, sin embargo es el más afectado.
Este vídeo de El País ilustra la grave situación africana causada por el cambio climático, ¡no te lo pierdas!
El Sahel
El Sahel es una zona situada en África que destaca por ser las que más sufre la escasez de alimentos y las consecuencias del cambio climático. Está formada por estados fallidos (Senegal, Mauritania, Malí, Burkina Faso, Nigeria, Níger, Chad, Sudán, Etiopía y Eritrea) lo que genera una gran inestabilidad. Este lugar está considerado el más pobre y con peores condiciones de vida del mundo según datos del Índice de desarrollo humano.Pero, ¿cuáles son los problemas principales a los que se enfrenta esta zona? Los conflictos, pobreza, terrorismo, tráfico humano y la hambruna son el pan de cada día en el Sahel. Los estados que forman el Sahel son muy débiles y no ejercen el control sobre la zona, además muchos de ellos eran colonias, mayoritariamente francesas, por lo que también hay que sumarle a la situación una crisis política.
Existen muchos grupos de población que no se sienten parte de ningún país y se niegan a aceptar la existencia de fronteras. Los tuareg son un claro ejemplo de esto, se mueven a través del Sahel sin pertenecer a ningún estado en concreto.
Debido a esta falta de control de los gobiernos y crisis política, muchos de los países tienen conflictos internos muy graves que van desde el terrorismo hasta el tráfico de personas. Decir que las mayores redes de narcotráfico, trata de blancas, tráfico de personas y de armas y terrorismo actúan en esta zona. A todos estos problemas hay que sumarle que el Sahel es la zona más afectada por el cambio climático y que tanto animales como seres humanos se están muriendo de hambre.
La natalidad, además, es muy elevada en esta zona y muchas familias se ven en situaciones precarias para poder alimentar a los niños. Estos últimos se convierten en presas fáciles para los grupos militares y terminan siendo niños soldados. Está situación se da en muchos sitios, pero la mitad de los niños soldados del mundo se encuentran en esta zona.
El terrorismo es un factor muy importante a tener en cuenta en el Sahel, AQMI (Alqaeda en el Magreb Islámico), Al Shabaab y Boko Haram operan en la zona. Estas tres organizaciones son las más peligrosas y activas en temas de terrorismo, y sobre todo yihadismo, en la actualidad.
En la actualidad, a estos problemas se ha sumado la rebelión de los tuareg. Este grupo poblacional se ha rebelado contra los gobiernos porque consideran que las medidas de estos solo están ayudando a fortalecer la pobreza. También hay un conflicto importante debido a la explotación de recursos en Níger, este es conocido como la Guerra del Uranio. Este último conflicto lleva muchos años activo y se ha cobrado la vida de muchas personas.
Este cúmulo de problemas ha generado una respuesta europea y estadounidense grave: han militarizado la zona. El país donde se han centrado las operaciones ha sido Malí, la ONU ha enviado unos 13.000 efectivos a la zona para apoyar al gobierno y evitar que los grupos terroristas y criminales se hagan con el control del país. Está operación de Naciones Unidas es considerada una de las más peligrosas en la historia, más de 115 miembros del equipo enviado han sido asesinados.
Debido a esta situación, gran parte de la situación se traslada a otros lugares, convirtiéndose así en inmigrantes. Pero, las precariedades no terminan cuando abandonan el Sahel. Muchas de las personas no sobreviven el viaje, otras se convierten en ilegales en otros países y las mujeres suelen terminar como prostitutas en los países desarrollados.
La película documental Once Upon a Time in Sahel retrata la realidad de los africanos del Sahel a la perfección:
La situación de África es muy mala y muchas personas desconocen la gravedad de los problemas que acechan al continente, ¿te ha parecido interesante esta información?