La víctima contaba con un teléfono que le fue entregado para que llamara a la Ertzaintza si volvía a tener problemas con su ex marido, pero nunca lo utilizó. Además, en las instituciones no consta que Héctor Melecio violara la orden de alejamiento. Por estas razones, la directora de Atención a las Víctimas de la Violencia de Género dependiente de Interior, Mariola Serrano, considera que la víctima “no tenía un riesgo especial”.
Pero la realidad era muy distinta, ya que los vecinos estaban acostumbrados a ver al agresor rondando cerca de la casa de la mujer para vigilarla, pero nadie denunció este hecho.
El presidente del Tribunal Superior, Juan Luis Ibarra, ha animado a todas las mujeres maltratadas a denunciar su situación y las violaciones de las órdenes de alejamiento y explicó: “Utilizamos muchos medios, pero algunos son más eficaces si la sociedad da un paso de acción, no solamente protestando contra los agresores, sino poniendo en conocimiento de las autoridades los incumplimientos de órdenes”.
¿Si Daysi Medoza hubiera denunciado que su marido había violado la orden de alejamiento, seguiría viva?¿Creéis que si la sociedad se implicara más con los casos de violencia de género se reduciría el número de éstos?
Foto: Nocheinfinitamas.blogspot
Información: El País
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