Así que para las mujeres musulmanas vivir en Francia a partir de ahora no será nada fácil, pues en el caso de que utilicen en público el burka o el niqab, tendrían que pagar una multa de unos 150 euros, ya que estarían infringiendo la ley.
La mayor parte de los franceses está a favor de esta ley, pues consideran que estas prendas son símbolos de la opresión de la mujer. Por el contrario, las mujeres que se han visto afectadas por esta medida creen que la nueva ley va en contra de su libertad, ya que ellas “se sienten desnudas sin velo”.
Así que, por un lado, esta ley defiende la libertad de la mujer, ya que intenta lograr que las mujeres musulmanas puedan caminar por la calle con la cara descubierta. Pero por otro lado, las mujeres que libremente decidan utilizar el velo, no podrán hacerlo.
¿Qué opináis vosotras? ¿Estáis a favor o en contra de esta ley que ha adoptado el Gobierno de Sarkozy?