Nada de política, religión, fútbol,... nada de agobios, pasemos un buen rato juntos y disfrutemos, de esos temas ya hablaremos otro día.
Deja el coche y coge la bicicleta o ve andando, dale un respiro al planeta.
En febrero comenzamos a hablar sobre el octavo punto fundamental del Manifiesto Hygge, la tregua, centrándonos en la socialización, pero también es importante que, no sólo os demos una tregua a nosotr@s mism@s, sino que también se la demos a nuestro planeta. ¿Cómo?
Deja el coche y coge la bicicleta o ve andando.
Crea tu propio huerto urbano.
Las ciudades están cada vez más contaminadas, de hecho, se ve en la distancia si te alejas de ellas. Vivo en un pueblo de Guadalajara muy cerca de Madrid y cuando voy por la carretera acercándome a Madrid se ve la ciudad envuelta en una niebla gris, toda esa contaminación que generamos y que es perjudicial para nosotr@s mism@s.
Los daneses suelen utilizar coche y transporte público, pero en las calles de Dinamarca reinan las bicicletas, un medio de transporte ecológico, barato, que nos ayuda a estar en forma y cuidar de nuestra salud y el medio ambiente.
Debemos darnos cuenta de que tenemos que parar, cambiar de hábitos y educar a las nuevas generaciones a cuidar mejor de nuestro planeta y a respetarlo.
Mis padres tienen una casa en Chipiona, para acceder a la playa hay que pasar por un camino de madera que respeta la duna que es una zona protegida porque hay camaleones. Pues más de una vez he visto a niñ@s tirar cosas y, no creáis que los padres le han reñido, que va, sino que tampoco han recogido lo que ha tirado su hij@. Y sí, me he indignado, porque qué estamos haciendo con los más pequeños, no los estamos educando y enseñando el valor de las cosas, la importancia de sus actos, ... Pero, ¿si nosotr@s no lo hacemos, qué van a hacer ell@s?
¿Os habéis parado a pensar cuantas personas con alergias e intolerancias hay en los últimos años? Pues es por la tregua, bueno, mejor dicho es por la no tregua. El estrés, la mala alimentación, la contaminación,... todo eso acaba repercutiendo en nosotr@s y nuestro bienestar.
¿Te has planteado crear tu propio huerto urbano? Pues quizás ahora es el momento. Cuando pruebes los frutos de tu huerto ya no querrás nada más, te lo aseguro.
Démonos una tregua y también al planeta, dejemos que el hygge nos envuelva, saldremos ganando, seremos más felices y saludables.
El hygge da mucho de qué hablar, así que seguiremos en abril. Pero antes de marcharnos os propongo la tarea de este mes, cuéntanos qué es lo que haces para estar en tregua, contigo mism@ y con el planeta. Ya sabes que compartiendo tus experiencias podemos conseguir encontrar la receta de la felicidad entre todos.
¡Que tengáis un feliz lunes y una semana muy hyggelig!