Gracias al calentamiento global, las emisiones de gases de efecto invernadero, y a la cada vez más preocupante escasez de agua, el problema es cada vez más grave.
Científicos de la NASA han analizado el estado de los acuíferos dulces subterráneos del planeta, y los resultados han sido preocupantes. De todos ellos se extrae más agua que la que se repone, por lo que es sólo cuestión de tiempo que terminen agotándose.
La sequía es uno de los desastres naturales más destructivos. En la actualidad, afecta a casi la mitad de la población mundial, y se estima que para el año 2050, podría afectar al 60% de la población.
La tierra seca va extendiendo su territorio, dejando terrenos áridos y como consecuencia de esto, pobreza. Según investigaciones del CSIC, en la mitad sur de España y la zona de Levante, las temperaturas podrían subir de 4 a 6º y las precipitaciones se podrían reducir en torno a un 30%.
Desde las Naciones Unidas, se anima a los estados a usar métodos preventivos, para aumentar la capacidad de resistencia de cada región. Los diferentes sistemas de alertas, son eficaces en cuanto a la prevención, por eso es importante organizar diferentes métodos de seguimiento y evaluación continua, como son los que realiza AEMET en España.
Seguir los planes de las directrices internacionales en este aspecto también es fundamental. Hay que apostan por mantener una sostenibilidad hídrica lógica.
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