Muchas veces pequeños cambios tienen un gran impacto, has oído alguna vez que el aleteo de una mariposa puede provocar un huracán al otro lado del mundo. Lo que te voy a contar es algo parecido: las implicaciones para el medio ambiente de un simple clic.
Puedes pensar que como consumidor no puedes hacer más que elegir lo que compras, dónde lo compras y proponer alternativas al fabricante. No obstante, dependiendo de cómo lo hagas cambia nuestro impacto. ¿Quieres saber qué puedes hacer? Pues sigue leyendo.
¿Dónde está el problema de las compras online?
Cómo ya comentaba en otras ocasiones elegir bien lo que compramos es muy importante. Lo que más impacto ambiental tiene de toda compra, es el proceso de fabricación.Por eso, elegir empresas que tengan sus esfuerzos hacia la sostenibilidad es tan importante. Desde el uso de los materiales, al embalaje, como a las formas de transporte hasta los puntos de venta.
Si obviamos la parte de fabricación, desde que sale de la fábrica y llega a nuestras manos, el punto más crítico y donde más impacto ambiental se produce es en lo que se conoce como la «última milla». Es el tramo desde que el repartidor coge el paquete del almacén de tu localidad y sale para entregarlo en nuestra casa.
La última milla, es lo que hace que sea mejor comprar en una tienda online que ir en coche a una tienda local.
No obstante, te preguntarás: ¿qué puedo hacer yo para mejorar esta última milla? En el siguiente apartado encontrarás la respuesta…
5 claves para hacer tus compras online más sostenibles
1- Agrupar tus compras
Debido a que la mayor contaminación se produce en el transporte si agrupamos nuestras compras en un único pedido ahorramos viajes y por tanto emisiones innecesarias.Yo lo que hago es ir apuntando las cosas que necesito en una lista y a la hora de hacer el pedido evito pensar y ya se lo que necesito comprar.
También, aunque hay una pequeña variación de precio, comprar lo máximo posible en la misma tienda ahorra que te lleguen diferentes paquetes.
2- Huye del envío express
El envío en un día, es algo flipante. Yo la primera vez que lo utilicé me resultó sorprendente que fuera posible pedir algo de tarde y al día siguiente por la mañana ya tenerlo entre las manos.Para nuestro cerebro la satisfacción inmediata es algo que le encanta, es adicto al placer. Poder comprar algo y casi de manera instantánea nos llegue a nuestras manos, es algo «placentero«.
Además, en muchas tiendas este tipo de envíos es gratuito. Por lo que, invita más a hacer este tipo de compras. Pero, ¿qué sucede cuando hacemos un pedido con envío express?
Pues lo que sucede es que la empresa de logística no tiene tiempo para optimizar los camiones de reparto ni las rutas. Al primar el tiempo, la eficiencia se descuida y la contaminación asociada a nuestro envio aumenta.
En cambio, si elegimos un tipo de entrega estándar, permitimos que la empresa de logística pueda agrupar los paquetes por zonas y de esta manera optimizar las rutas. Con esta simple elección estamos reduciendo nuestra huella de carbono.
El 85% de los clientes eligirian la entrega verde si supieran que reduce la huella de carbono de su compra, aunque tengan que esperar más por su pedido
Estudio del MIT Centre for Transportation & Logistics
3- Evitar los reintentos
¿Te ha pasado que pides algo y cuando intentan entregarlo no estás en casa? A mi no sería la primera vez. El problema es que te lo vuelven a intentar entregar o te lo dejan en la oficina más cercana.El 60% de paquetes no se entrega en el primer intento
Y a no ser que te puedas desplazar sin utilizar el coche a la oficina más cercana, en ambas situaciones la «última milla» se repite y la huella de carbono del envío aumenta. ¿Qué podemos hacer para evitar esto?
La primera opción es enviar los paquetes al lugar de trabajo. Debido a la cantidad de horas que estamos, suele ser el lugar más fiable para recibir las compras.
Otra alternativa, es utilizar un punto de entrega al que puedas llegar caminando o en bicicleta. De esta manera la entrega se producirá con éxito a la primera y tu podrás ir a buscarlo cuando mejor te venga.
4- El coste real de las devoluciones
Hay comercios que permiten devolver los productos sin coste para el cliente. De primeras puede parecer interesante para el cliente, también ayuda a hacer la compra y a confiar en el comercio.No obstante, puede llevar a hacer compras poco meditadas y sin importar tener que gastar dinero en la devolución.
Además de que los esfuerzos para llevarnos el producto fueron en vano. En la devolución se pueden deteriorar y en muchos casos no son puestos de nuevo a la venta.
Por tanto, hay que pensar que, aunque no tenga un coste económico, la compra ha tenido un coste ambiental que suma a nuestra huella.
5- El producto y la tienda
No todos los comercios son lo mismo, y aunque compres el mismo producto puede haber bastantes diferencias en cuanto a la forma de empaquetado, condiciones laborales de los empleados, etc.Por eso, además del producto, es importante fijarnos en dónde lo compramos. Hay tiendas que pueden resultar muy interesantes por bajos precios, envíos rápidos, condiciones de devolución… Pero en cambio las condiciones laborales no son éticas o las ganancias no revierten en tu país.
Desde mi punto de vista, lo mejor es confiar en pequeños comercios online que tengan valores de sostenibilidad y ganas de hacer las cosas mejor.
Si estás empezando en este camino, te estarás preguntando dónde puedes encontrar estos comercios. Así que para facilitarte la tarea aquí te dejo un listado de tiendas interesante.
Conclusión
Como habrás podido leer con pequeños cambios podemos mejorar mucho nuestra huella con cada compra que hacemos. Es sólo cuestión de disponer de información y estar dispuesto a pensar un poco sobre nuestras compras antes de hacerlas.Como resumen aquí te dejo las 5 claves para hacer tus compras online más sostenibles:
Agrupa tus pedidos
Elige la forma de envío estándar
Procura estar en casa o elige un punto de entrega cercano
Evita comprar con la idea de devolver.
Elige tiendas que se ocupen de hacer el envío más sostenible
Como en todo, no hay nada bueno o malo. Cada decisión tendrá sus ventajas e inconvenientes. Lo importante es hacer las cosas de acorde con nuestros valores y lo mejor que podamos en cada momento. Y hacerlo «lo mejor que podamos en cada momento» no significa que sea perfecto, que no lo será.
Hasta la semana que viene,
¡Salud y sostenibilidad!