Dicho esto, debemos saber que la biomasa se utiliza, como hemos mencionado, para producir calor. Y los aparatos que se encargan de esta función son las estufas y calderas de biomasa. Pero, ¿sabemos la diferencia que hay entre ambas?
Diferencias entre las estufas y las calderas de biomasa
Estufas de biomasa
Las estufas de biomasa se encargan de producir calor para estancias pequeñas, normalmente habitaciones. Una única estufa de biomasa no es suficiente para calentar una casa entera, por lo que se suelen colocar en salones o dormitorios principales para general el calor necesario para caldear unos cuantos metros cuadrados.
Calderas de biomasa
En cambio, las calderas de biomasa cuentan con un sistema capaz de ofrecer calor a viviendas completas, una comunidad de vecinos completa, a un unifamiliar, un colegio o edificios que, sin ser de gran tamaño, sí cuentan ya con más extensión que una única habitación.
Además, una de las diferencias principales de las estufas y las calderas de biomasa reside en el hecho de que estas últimas también suelen ser capaces de suministrar agua caliente.
Por lo tanto, y resumiendo, las calderas de biomasa son aparatos con mayores prestaciones, mientras que las estufas están únicamente pensadas para habitaciones sueltas.
En cualquier caso, tanto las estufas como las calderas de biomasa son una buenísima forma de producir calor en invierno de una forma mucho más limpia que utilizando otros tipos de combustibles, como el gasóleo.