Para el maratón de Boston en el 1967, Kathrine Switzer se inscribió a la carrera bajo el nombre de K.V. Switzer, por lo que los organizadores no sabían que era una mujer. Además se las apañó para no tener que pasar por una prueba física hecha por la organización y que la podía dejar fuera de la maratón.
Con el dorsal número 261, Kathrine Switzer empezó la maratón, hasta que uno de los jueces se dio cuenta de que era realmente una mujer, por lo que la siguió e intentó detenerla, pero los demás corredores se lo impidieron, de manera que Kathrine pudo finalizar la maratón en un tiempo de 4 horas y 20 minutos.
La famosa foto que dio la vuelta el mundo muestra como uno de los jueces intenta detenerla mientras los demás corredores se lo impiden y escoltan a Kathrine para que pueda terminar la carrera.
Desde aquel día, Kathrine ha luchado contra la desigualdad entre hombres y mujeres, organizando carreras en 27 países, en las que han participado más de un millón de mujeres, y en 1984 consiguió que el maratón femenino fuera prueba olímpica.
¿Conocías la historia de esta mujer?