Chusti con un añito y con ojitos
Cuando estábamos seguros de que Chu había perdido por completo la vista, seguimos aplicándole el tratamiento con las gotas durante un pequeño periodo de tiempo, me ha venido una inspiración y he recordado y comprobado el nombre del colirio: Xalatán. Pero tras hablar con los veterinarios y ver que ya no había nada que se pudiera hacer y que era imposible recuperar la visión, decidimos operarla, además el glaucoma suele ser doloroso y no queríamos que Chusti sufriera más de lo que ya lo había hecho.
¡Aunque ya no pueda ver también puedo divertirme y disfrutar del invierno!
La operación para extirpar los ojos tiene más o menos el mismo tratamiento de curación que otras, hay que limpiar los puntos con Yodo evitando que las cicatrices produzcan costra a diario, hay que administrar antibióticos según las directrices del doctor y debemos ponerle un cono a nuestro perro en la cabeza durante unos 15 días para evitar que se arranque los puntos con las patitas.
También me encanta disfrutar de la hora de la siesta.
Cuando nuestro perro vuelva a la relativa normalidad, podemos comenzar a enseñarle algunos trucos para que se defienda mejor a la hora del paseo o en la casa cuando esté solo. En mi caso Chusti se había quedado ciega antes de la operación, por lo que empecé a acostumbrarla entonces.
Lo más difícil a mi parecer para los perros que se quedan ciegos es el tema de los escalones, si un escalón esta solo, puede darse un susto, pero si son muchas escaleras seguidas, se puede hacer bastante daño.
Yo comencé con una orden simple y clara cada vez que nos acercábamos a un escalón, del tipo sube o baja. Además de eso podemos marcarle el escalón con un paso más pronunciado, para que haga más ruido y se pueda hacer a la idea de donde está y cuanto mide de alto. Si tenemos paciencia y repetimos esto cada vez que subimos o bajamos un peldaño, nuestro perro terminará por acostumbrarse y solo tendremos que dar la orden sube o baja.
Me gusta tanto la siesta que la disfruto incluso con la Mixa.
Otra cosa que podemos hacer para que sienta más confianza a la hora del paseo, es premiarle con chuches cuando haga una cosa bien. Podemos enseñarle/reeducarle, ya sabéis los dueños de perros bien educados, que de vez en cuando conviene repasar lo que ya sabemos... Así que que mejor ocasión que esta, así distraeremos a nuestro amigo y le subiremos el ánimo perruno, incluso podemos enseñarle trucos nuevos si disponemos del tiempo y la paciencia necesarias.
Podemos repasar en casa el sienta, sit, seu, o la orden que usemos para que nuestro perro se siente. Luego en la calle cuando veamos que está relajado, puede ser en un parque o en un lugar amplio y medianamente silencioso, volveremos a dar la orden y cuando lo haga bien le premiaremos con una chuche (una croqueta de pienso, un cachito de salchicha, jamon york, etc.) La educación posiva en perros es algo delicado, por lo que si nunca lo has hecho antes te recomiendo que leas algo de información primero :)
No soy muy gruñona, como veis hago amigos de todo tipo
Existen unos arneses especiales para perros ciegos, yo la verdad es que no los he usado nunca, pero puede que a vosotros os sean útiles. Os dejo una foto y un enlace para que averigüéis más:
Fuente de la imagen: Ortocanis
En el enlace anterior nos enseñan a fabricar un arnés para un perro ciego, así que os recomiendo visitarlo.
Fuente de la imagen: elcomercio.pe
Otra cosa que yo hacía muchas veces para divertir a Chu y para ayudarla a agudizar sus sentidos era sentarla y pedirle que se estuviera quieta, cuando conseguía esto, le daba una chuche y le volvía a pedir que se estuviera quieta. Después, cogía un puñadito de pienso y lo lanzaba al aire. En este caso si debemos usar pienso seco, porque suena al caer. Debemos ir también a un lugar con cemento o baldosa que sea amplio y podamos estar tranquilos, en mi caso era fácil, pues tenía un patio bastante grande y era ahí donde ensayábamos Chusti y yo. Entonces cuando todas las bolitas de pienso caían alrededor de Chu le decía ¡Busca! Este ejercicio para perros ciegos los ayudará a mejorar sus sentidos del olfato y oído, además le dará un periodo de distracción y alegría.
De vez en cuando, a pesar de estar ciega, no me libro de los baños de espuma.
Existen en el mercado unas pelotas en las que podemos meter alimento y que el perro debe ir girando con la nariz para que poco a poco vayan saliendo los premios. Nos podemos ayudar también de este tipo de herramientas, se suelen usar para los perros ociosos, pero para los perros ciegos también pueden ser muy útiles, pues los distraerán, les ayudarán a moverse despacito por la casa y como siempre ayudarán a mantener un estado de ánimo positivo.
A veces me paro en sitios estratégicos y aprovechan para hacerme fotos en casa...
También podemos usar una pelota con un cascabel dentro para nuestras salidas con nuestro perro invidente, que esté ciego no quiere decir que no pueda volver a correr nunca más, de echo Chu corría y cuando íbamos al monte o a la playa siempre iba sin correa y delante nuestro, las únicas precauciones que debemos tener es que en los lugares con mucho ruido, como el mar, no debemos perdelos de vista, pues pueden desorientarse debido al fuerte sonido de las olas o el viento y debemos ser nosotros los que los llamamos si vemos que esto sucede.
Incluso me atrevo a meterme en el mar a nadar, siempre bajo supervisión, claro.
Y por último una pequeña lista de cosas que no debemos hacer si nuestro perro se ha quedado ciego:
- No debemos mover los objetos de la casa como sillas u otros trastos pesados dejándolos por el medio, pues lo más seguro es que nuestro perro tropiece con ellos. El tendrá un mapa mental de la casa y si le cambiamos las cosas de sitio podemos confundirle, además de que se puede hacer daño.
- No debemos cambiar el agua y el comedero de nuestro perro ciego.
- No debemos exponerle a situaciones de estrés si podemos evitarlo.
- No debemos olvidar nunca que se ha quedado ciego y que depende de nosotros para muchas cosas, aunque a veces el perro se comporte como si nada.
La clave de que nuestro perro pueda volver a moverse con total libertad y confianza depende en gran parte de nosotros, pues no debemos protegerles en exceso, ni sentir lástima por ellos, eso no quiere decir que no podamos ayudarles en determinadas ocasiones, pero si nuestro perro tiene miedo a afrontar una situación, debemos ser pacientes y buscar el modo para que pueda superarla, puede ser bien con una distracción externa, con comida, usando una actitud alegre y positiva... Aunque esto creo que da para un post completo.
A veces Sergi es todo un guasón...
...Y me pone cosas en la cabeza!