1. A veces el algodón orgánico ha crecido bajo monocultivo intensivo, una práctica poco sostenible.
Aunque el algodón orgánico es mucho mejor para el planeta y las personas que el tradicional, ya que nos garantiza que no se han utilizado pesticidas ni insecticidas para su cultivo, en muchos casos es cultivado en campos de monocultivo intensivo para producir más algodón a menor coste. Esto significa que esa tierra queda monopolizada y, en muchos casos, deja a comunidades enteras sin espacio para cultivar alimentos que les permitan subsistir. Además, la tierra queda muy empobrecida. Un algodón orgánico sostenible de verdad fomentará la agricultura regenerativa, promoviendo el cultivo diversificando y fomentando la simbiosis.2. Hay algodón ecológico que ha sido cultivado por personas a las que no se respeta sus derechos laborales.
Muy alineado con el aspecto anterior, es importante tener en cuenta que existen prácticas de cultivo e hilado de algodón que son muy respetuosas con el planeta, llegando a tipificarse de ecológicas y sostenibles pero que no son nada respetuosas con las personas, ya que permiten la explotación laboral. Es importante asegurarnos que el cultivo y manipulación del algodón se ha realizado bajo los principios del comercio justo o, como mínimo, de lo que marca la Organización Internacional del trabajo (OIT)..3. Cultivar algodón orgánico sólo con agua de lluvia es más arriesgado, pero también más sostenible.
Seguro que muchas veces has escuchado decir que para confeccionar una camiseta de algodón convencional se necesitan unos 2.000 litros de agua. Una de las ventajas del algodón orgánico es que esta cantidad de agua para su cultivo disminuye enormemente, ya que al no usarse pesticidas preventivos, normalmente aplicados con una disolución en agua, el ahorro hídrico es sustancial. Aún así, no es lo mismo un algodón orgánico que crece solo con el agua de la lluvia que aquel que se riega artificialmente. Además, una parte importante de los litros de agua consumidos para la fabricación de tu camiseta, proceden de procesos posteriores al cultivo de la materia prima, como pueden ser los blanqueados, tintados, estampados, tratamientos anti encogimiento, anti peeling y demás, así que también es muy importante saber cómo se han llevado a cabo estos procesos.4. Utilizar algodón orgánico de color o tintarlo de manera natural cuesta más, pero es mejor.
Un elemento que supone un gran consumo de agua y uso de químicos es el blanqueado y posterior tintado del algodón. Afortunadamente cada vez mas firmas sensibles a este tema no blanquean el algodón y sólo lo tintan de manera natural y sin químicos, lo que, naturalmente, hace que el color de la prenda varíe lavado tras lavado. En el pódium de este tipo de algodón encontramos el algodón orgánico a color. Y es que no se si sabías que antes de la revolución industrial el algodón, de manera natural, crecía en varias tonalidades, pero la industrialización acabó eliminando ese tipo de cultivos por se poco rentables y prefirió solo usar la variedad de color crudo, blanquearla y luego tintarla químicamente. Afortunadamente las variedades de color de la planta se conservaron y actualmente encontramos firmas como Organic Cotton Colours, que cultiva y comercializa algodón orgánico de color verde y marrón que no es necesario tintar, lo que ahorra un montón de químicos y de agua.Así que ya sabes, siempre será mejor comprar una prenda de algodón orgánico frente a una que esté hecha de algodón convencional, pero si puedes (sin agobios ni ralladuras mentales), antes de pasar la VISA intenta mirar un poco más allá y ver si tiene alguna certificación que te pueda garantizar el trato justo a las personas que la han trabajado, piensa en cómo ha sido tintada y si esto le permite seguir llamando a la prenda ecológica y mira si el fabricante te da algún tipo más de información. Seguro que si se lo ha currado, lo explica.