Parece increíble, pero en pleno siglo XXI todavía hay marcas de moda que no saben dónde se encuentran ni cómo trabajan sus proveedores. Pero realmente no lo saben, ¿o no nos lo quieren contar?
Para acabar con esta “incertidumbre”, el año 2016 diversas organizaciones de derechos humanos entre las que se encuentran Clean Clothes Campaign, Human Rights Watch y algunos de los principales sindicatos textiles, crearon el Compromiso por la Transparencia (en inglés Transparency pledge), un pacto de mínimos en el que se pidió a 74 empresas de moda con marca propia que publicaran en sus sitios web una lista de los nombres, direcciones y otros detalles de las fábricas involucradas en el ensamblaje, embellecimiento y acabado de sus productos. Puedes acceder a los detalles del Compromiso por la Transparencia de proveedores de moda aquí.
Pues bien, tres años después, el informe publicado el pasado mes de diciembre por la Human Rights Watch (HRW) determina que 22 de esas empresas ya han hecho públicos estos datos; 19 están trabajando en el proceso pero todavía tardarán en conseguirlos publicitar, 15 hacen una publicación de mínimos, solo comunicando el nombre y dirección de dichos proveedores (tres de ellas solo la región en la que se encuentran) y 18 no publican nada ni se han comprometido a hacerlo. Además, a fecha de hoy 17 nuevas marcas se han sumado al compromiso publicando dichas informaciones o estando a punto de hacerlo.
Grado de transparencia de las marcas de moda involucradas en el informe #GoTransparent
22 empresas cumplen con prácticamente todo el Compromiso de Transparencia:
Adidas, ASICS, ASOS, Benetton, C&A, Clarks, Cotton On, Esprit, G-Star RAW, H&M, Hanesbrands, Levi Strauss, Lindex, Mountain Equipment Co-op, New Balance, New Look, Next, Nike, Patagonia, Pentland Brands, PVH Corporation, and VF Corporation.19 empresas han empezado a dar a conocer información sobre sus proveedores:
Aldi, Arcadia Group, Bestseller, Columbia, Debenhams, Gap Inc, Hugo Boss, John Lewis, Marks and Spencer, Mizuno Corporation, Morrisons, Primark, Puma, Rip Curl, Sainsburys, Shop Direct, Tchibo, Under Amour, Zalando.15 empresas han publicado sólo el nombre y la dirección de sus proveedores:
Amazon, Coles, Disney, Fast Retailing, Hudsons Bay Company, Kmart Australia, Lidl, Matalan, Target Australia, Target USA, Tesco, Woolworths. Por su parte, Abercrombie & Fitch, Desigual y Loblaw sólo han publicado sólo el nombre y el país.18 empresas no publican ninguna información acerca de sus proveedores:
American Eagle Outfitters, Armani, Canadian Tire, Carrefour, Carters, Decathlon, Dicks Sporting Goods, Foot Locker, Forever 21, Inditex, KiK, Mango, Ralph Lauren, River Island, Sports Direct, The Childrens Place, Urban Outfitters, and Walmart.17 empresas se han sumado al Compromiso de Transparencia:
Alchemist, Dare to Be, Eileen Fisher, Fanatics, Fruit of the Loom, HEMA, KappAhl, Kings of Indigo, Kontoor Brands, Kuyichi, Lacoste, Lululemon Athletica, Okimono, Schijvens, Toms, We Fashion, and Zeeman Gildan acaba de empezar a hacer pública dicha información.Todos los detalles de estas empresas y su nivel de alineación con el Compromiso de Transparencia sobre sus proveedores en el anexo II del informe.
¿Qué te parece los resultados? A mi entender, aunque no espectaculares, sí que demuestran la utilidad de la coalición, que ha conseguido que varias empresas hayan realizado un ejemplar ejercicio de transparencia y, quizás lo más útil, permiten poner en evidencia a aquellas que se demoran o directamente se niegan en hacer pública esa información.
Iniciativas empresariales responsables y de transparencia (RBIs)
Además del trabajo con las marcas, las organizaciones que lideran este Compromiso por la Transparencia han estudiado otras iniciativas existentes en el mundo orientadas a pedir mayor transparencia a las marcas de moda (los RBIs – Responsible Business Initiatives and Transparency) para determinar el grado de alineamiento que tienen con sus demandas y han hablado con todas ellas para buscar la complicidad y el trabajo conjunto.Las conclusiones del estudio son muy interesantes, y es que antes de que se iniciaran las conversaciones en el año 2018, ninguna de estas iniciativas pedía a sus miembros la condición de hacer público datos sobre sus proveedores. Hoy, algunas ya están completamente alineadas con este objetivo, como la Fair Labor Association (FLA) o en proceso, como son la Agreement on Sustainable Garments and Textiles (AGT), la Ethical Trading Initiative (ETI) y la Fair Wear Foundation (FWF). Precisamente esta última está a punto de publicar una base de datos online y de acceso libre que mostrará toda esta información de sus miembros de manera detallada.
En el otro lado de la balanza encontramos a amfori, que alega tener demasiados actores diferentes asociados como para comprometerse a estas cuestiones; la Partnership for Sustainable Textiles (PST), que tras hacer votaciones internas de momento ha declinado adherirse; y la Sustainable Apparel Coalition (SAC), que está centrada en el Higg Index transparency, una herramienta de medición que pretende convertir en el índice común de la moda sostenible y, por tanto, ha decidido no gastar energías en este proceso.
En el anexo 1 del informe podéis comprobar a qué RBIs están adheridas cada una de las empresas textiles del Compromiso por la Transparencia y, considero especialmente interesante la tabla en la que se muestra cuántas empresas de cada RBIs están alineadas con los “Transparency Pledge. Además, el estudio incluye un Anexo 3 con el detalle de todas las conversaciones que se ha mantenido con cada una de estas organizaciones.
Está claro que conocer quiénes son los proveedores de las marcas de ropa que vestimos no es la solución para acabar con la explotación laboral y las malas praxis en este sentido, pero es una prueba de que la empresa sabe dónde y cómos se fabrican sus productos y puede ser de gran ayuda en aquellos casos en los que se están vulnerando claramente derechos humanos. Además, iniciativas como la del Compromiso por la Transparencia permiten que organizaciones que están trabajando también en este sentido puedan contar con datos más detallados, como es el caso de Fashion Revolution y su Índice de Transparencia, que en su última edición ha confirmado el gran crecimiento de marcas de moda que muestran públicamente un listado de proveedores de primer nivel, triplicándose respecto al mismo informe el año 2016.
#GoTransparent
Así que ya sabes, si cuentas con una marca de moda te animo a seguir las petición del Compromiso por la Transparencia y a hacer pública toda la información que solicita. Luego puedes contactar con ellos y comunicarles tu iniciativa. Y a la hora de consumir, te animo a buscar esta información antes de realizar cualquier compra y a si no la tienen, preguntar a la marca. Aquí tienes todo el kit de comunicación #GoTransparent que Human Rights ha creado para facilirarte la petición. Y es que como afirma Aruna Kashyap, asesora legal de la división de derechos de la mujer de Human Rights Watch: “La transparencia no es un remedio para los abusos de los derechos laborales, pero es fundamental para una empresa que se describe a sí misma como ética y sostenible”. “Todas las marcas – concluye- deberían adoptar la transparencia en sus cadenas de suministro, pero en última instancia se necesitan leyes que exijan esta transparencia y hagan obligatoria la implantación de prácticas fundamentales de derechos humanos”.¿Estás de acuerdo? Me encantará leer tus opiniones.
Vía Human Rights.