¿Estas familiarizada con el picor, la irritación, quemazón, rojeces, descamación y hormigueo en tu piel? Si estos síntomas son tu día a día, siento ser yo quien te lo diga pero... Tienes la piel Sensible. Cuando decimos que tienes la piel sensible nos referimos a que tu piel reacciona de forma desmedida ante agentes que en la mayoría de la población no producen reacción alguna, es decir, estamos ante una piel hipereactiva. Pero no desesperes, no eres la única y aquí te vamos a dar unos Tips para que tengas a raya los síntomas y puedas disfrutar de tu piel como cualquiera.
La piel es la primera barrera del sistema inmunitario y una piel sana mantiene un delicado equilibrio protegiéndonos frente a los agentes externos. Cuando la función de barrera cutánea de la piel se deteriora, normalmente lleva asociada una perdida excesiva de agua y ello la hace más propensa a la penetración de agentes irritantes. Los principales factores que agravan los síntomas de la piel sensible son:
1.- Factores Físicos: Viento, Calor, Sol, Frío, etc
2.- Factores Químicos: Cambios hormonales, uso de químicos industriales, jabones, cosméticos, maquillajes, etc
3.- Factores Emocionales: situaciones de strés, ansiedad, presión, depresión, etc.
Es decir, tenemos una piel que se lleva mal con “casi todo” entonces, ¿qué podemos hacer para llevarnos bien con ella? Bueno, no desesperemos, una de las principales estrategias para contrarrestar los síntomas de la piel sensible es buscar tratamientos que nos ayuden a fortalecer la piel, restableciendo su equilibrio lipídico y estructura interna, con lo que buscamos restablecer la función de barrera cutánea de la piel. Además, te recomendamos que te pases a lo “verde” y con esto no queremos decir que comas más ensaladas sino que te plantees seriamente pasarte a la Cosmetica Natural Certificada que será la que mejor se llevará con tu piel.
TIPS PARA VIVIR CON LA PIEL SENSIBLE
1.- Una de las cosas que normalmente más desapercibidas pasan al hablar de este problema es el de la alimentación. Te recomendamos que te pases a una dieta rica en antioxidantes. Frambuesas, arándanos, uvas, brócoli, cacao, etc.Vitaminas como la A, C y E te serán muy beneficiosas así como el uso de aceite vegetales naturales ( aceite de oliva y girasol) o pescados grasos. Evita el alcohol así como las comidas picantes o muy especiadas ya que normalemnte tienen un efecto vasodilatador que acentúa la deshidratación. En este enlace te dejamos una infografía con 12 alimentos ricos en antioxidantes.
2.- Incluso en climas nublados el uso de un buen protector solar es imprescindible ya que la exposición directa de la piel a los rayos UV es uno de los factores más agresivos para la piel sensible. Evita las horas de mayor radiación solar y la exposición directa y elige un protector solar de cosmética natural y sin perfumes ya que estos suelen ser los que más capacidad irritante tienen.
3.- Como ya hemos ido comentando, pásate a lo verde, a la cosmética natural certificada que es la única que te asegura que sus productos son naturales, sin conservantes artificiales, parabenos, alcoholes ni perfumes de síntesis. Busca productos hidratantes tanto para el cuerpo como para la cara y fíjate bien en la composición e intenta elegir aquellos que menos principios activos tengan. échale un vistazo a estos por ejemplo: link
4.- Desmaquillate bien todos los días. Esto es algo realmente importante y que muchas veces se nos olvida. En nuestra rutina de belleza, la limpieza es uno de los procesos más importantes y si tenemos la piel sensible más aún. Hace algún tiempo dedicamos un post precisamente a este asunto, puedes verlo aquí.
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Fuente: este post proviene de Blog de Naturaonline, donde puedes consultar el contenido original.
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