Desde que vi en un programa de la tele unos cubos gigantes de unos jabones que tenían toda la pinta de ser de Alepo para decorar un baño, no tenía otra cosa en la cabeza que hacerme unos cubos iguales, en aspecto al menos. No aspiraba a más. No veía el día en que los usaría en mi ducha (y los luciría en mi cuarto de baño).
El caso es que como tenía aceite de coco y manteca de mango con fecha próxima, me propuse aprovecharlos a tiempo y hacerme unos supertacos de jabón que me serían muy útiles y muy prácticos a la par que muy decorativos. :P
Para ese color viejuno y tan rústico ya tenía aprendida la lección con una fragancia a flor de algodón que aún me quedaba de mis viejos tiempos, que olía genial a floral fresquito pero que por la vainilla en su composición (según el vendedor) me oscurece tanto el jabón y va perdiendo intensidad con el tiempo pero con un color más feo pero que para este caso le irá genial. Parecerá de esos jabones artesanos antiguos y viejos, como los de Alepo. Sólo que no en tonos verdosos. Pero serán lo más en mi baño.
Además usé esas piezas color claro para decorar, que quedaron irregulares en su día y que llevan aceite de Argán. Por lo que enriquecí la pasta nueva para los cubos con más aceite de Argán y con aceite de algodón.
Pensé que sólo tendríamos que depositarlo en la rejilla a él solo y pasarle la esponja húmeda por encima. El jabón ya no se resbala de la mano porque ya no hay que cogerlo ni resulta torpe ante las curvas de nuestro cuerpo. Obvio, no?...jjjj....
Aprovecho para recordaros un truqui-consejo para usar jabones artesanos (y otros) sin que se os caiga de la mano constantemente en la ducha (y en la bañera).
No me fue fácil encontrar un molde. Improvisando, como casi siempre, acabé con la caja de un mini-puzzle que tengo hace muchos años y que no tenía el tamaño perfecto pero tenía la forma correcta (el cubo de encima). Las otras las enmoldé en el molde de madera para barras de siempre. Tampoco es mala alternativa pero ahí los cubos quedan más pequeños.
Y a falta de maderas, cartones duros, y utillaje para bricolajear y tal, me conformé con las cajitas, pues tenía dos!. Las forré de gomaespuma cortada a medida y ... "et voilà!"...
Como eran para mi porque eran un experimento, aproveché y metí todo lo que pude: bolas de restos de otros jabones, rallé otros tantos restos de jabones antiguos de colores... y me salió este poupourri genial. Se aprecian bolas en la foto de arriba y cubitos de jabón diferente en la foto de abajo, pero también metí ralladura de jabón de otros colores que apenas se ven pero que una vez lleguemos a todos ellos alegrarán la vista. Será además, un jabón muy divertido!.
Me encanta este formato. A ver si me bricolajeo un molde un poco más grande o encuentro algo que me sirva porque también es un formato muy chulo para regalar. Aunque hay que tener en cuenta que los cubos más pequeños pesan más de 700 gramos y el de arriba pasa del kilo! ><
De hecho el experimento era si se curarían igual de bien que los formatos habituales, si quedaría blandengue o no manipulable o si necesitaría más semanas incluso meses... pero no. Una gozada!
Ya tengo jabón para mucho tiempo otra vez! Me tocará hacer otra excedencia larga jabonil obligada :-/
Porque es increible lo que duran estos jabones, me refiero a los jabones artesanos. La gente debe pensar que son como los de glicerina que se funden mucho antes, o no sé, pero que va! duran muchísimo tiempo. Demasiado, diría incluso. A veces, me desespera ver un culín de jabón que no acaba de agotarse por las ganas que tengo de empezar o de probar otro. Son un vicio! jeje...
Deciros que ya los he probado y son una pasada! Huele fresquito y hace mogollón de espuma, tanta que hasta los más tradicionales y conservadores de mi casa acabarán por usarlo! Ya no tienen excusa,... espuma interminable y que no les resbala porque no lo tienen que coger, sólo frotar la esponja por encima. :D
Se nota que chocheo con estos cubos de jabón 3D, verdad? Puse todas las fotitos.... jeje...
><
Finalmente, sus ingredientes son:
- aceite oliva virgen (50%)
- aceite de coco (35%)
- manteca de mango (15%)
En la traza:
aceite de Argán
aceite de algodón
Al enmoldar:
Figuras, trozos, bolas, ralladura de jabón
Aunque el porcentaje del uso de aceite de coco no debería pasar del 25%, en este caso el 35% no le afecta,no reseca la piel. Ha salido una combinación perfecta.
Por último, una observación... por si se hundían con la masa en caliente, los cuadrados blancos los puse en el fondo (la cara bonita hacia fuera, ojo! tocando el fondo del molde) intentando que no se movieran del centro al echar la pasta nueva.