El florecimiento del desierto de Atacama es un fenómeno que ocurre cada cierto tiempo, normalmente cuando llueve una vez cada 3 años o cada 10 dependiendo de los fenómenos climáticos.
La floración de Atacama tiene unas características de belleza que lo hacen un fenómeno singular.
El desierto de Atacama está al norte de Chile y tiene la fama de ser el más árido del mundo. Pese a las elevadas temperaturas y la extrema sequedad, la vida floral permanece latente.
Las más comunes son conocidas popularmente en Chile como suspiros del campo, patas de guanaco, malvillas, alcaparra, amancay, churqui, azulillos, cardo santo, etc.
Esta maravilla está asociado al fenómeno climático conocido como “El Niño”, que pese a ser frecuente, su aparición periódica varía entre los 3 y los 7 años, así que este pulso regula la aparición de esta vegetación xerófita, al promover las precipitaciones sobre el desierto.
La fauna floral del desierto de Atacama
Algunas de estas casi 200 especies de flores que forman la alfombra de colores rosa, fucsia, blancas, moradas y amarillas; son endémicas y en su conjunto están muy bien adaptadas a estas condiciones extremas.Los botánicos han catalogado 1800 especies de plantas, adaptadas a estas condiciones de aridez y cuyas semillas permanecen en estado de adormecimiento hasta que se produzcan las precipitaciones.
En julio ocurre la germinación de las semillas latentes y los brotes en los bulbos, por lo que las floraciones se dan entre agosto y octubre, aunque inusualmente también se presentan en el mes de marzo.
Todo esto hace que sea difícil predecir cuándo puede verse esta explosión de coloridas flores, a diferencia de lo que ocurre con las floraciones en otros desiertos en el mundo.
Durante este breve período en que se produce el desarrollo de las plantas, ocurre la polinización con la consecuente producción de semillas, la que volverán a entrar en período de latencia hasta poderse activar y germinar cuando llegue el próximo período de lluvias.
No todas las especies florecen simultáneamente y, dependiendo de la época, septiembre u octubre, se van desarrollando alternadamente pudiendo observar cómo va cambiando el colorido de la alfombra de flores.
El desierto florido es un área protegida y para apreciar el fenómeno, los visitantes tienen que llegar a la ciudad de Copiapó donde encuentra las condiciones e indicaciones que le permiten satisfacer su interés turístico.
Con el objeto de proteger la biodiversidad están las restricciones que prohíben la extracción de plantas y la caza de especies de animales nativos de la región.