Si eres amante de los animales, lo más probable es que hayas oído hablar de PETA. Es más, puede incluso que estés involucrado directamente con ellos, y que sigas a diario sus campañas y noticias.
PETA es una de las organizaciones a favor de los animales más famosas del mundo, sobre todo a causa de sus escandalosas campañas, sus masivas manifestaciones, y su largo historial de victorias en la lucha contra el uso de animales a favor de los humanos (comida, vestimenta, entretenimiento, y más). Sus siglas responden a People for Ethical Treatment of Animals, que se traduce a Gente (luchando) por el Trato Ético de los Animales. Pero lo que ellos consideran ético no siempre coincide con la opinión del público general.
No tenemos miedo a hacer comparaciones difíciles, a decir lo que no es popular, o a señalar la incómoda verdad, si eso beneficia a los animales, dicen en su página web. Y es que al igual que tienen 3 millones de seguidores, también tienen su dosis de críticas.
Pero vamos a mirar primero lo bueno que tiene PETA, y las razones por las que tienen tantos seguidores en todo el mundo.
Lo Bueno de PETA
Principalmente, PETA lucha por la abolición del uso de animales en la industria alimenticia, en el mundo de la moda, en los laboratorios, y en el sector del entretenimiento. La gran mayoría de sus campañas, pues, tienen el objetivo de liberar víctimas de la vivisección, de presionar a grandes compañías para ofrecer más productos veganos, o de concienciar al público sobre el uso de pieles y de cuero, por ejemplo.
PETA está, así pues, a favor del veganismo, y ofrece guías y recursos varios de forma gratuita para ayudar a aquellos que se quieran iniciar en este estilo de vida.
Otra de las acciones de la organización es el apoyo al movimiento Cruelty-Free, del que ya hemos hablado en el blog, y que consiste en producir, consumir, y apoyar productos que no han sido testados en animales. Tan involucrada está, que tiene su propio sello y directorio que certifica a varias compañías y marcas como libres de crueldad.
Además, la presencia de PETA en las redes sociales es envidiable por muchas otras organizaciones. Su página web y su newsletter informan de las últimas novedades en el mundo de la crueldad animal, y sus cuentas de Facebook, Twitter y Youtube, entre otras, conectan con sus seguidores de manera muy activa (aunque suelen mostrar contenido gráfico).
¿Qué voy a decir? PETA ha llamado la atención de los medios y ha dado voz a muchos asuntos que normalmente quedarían en silencio. Admiro sus esfuerzos para acabar con la crueldad animal en general, y agradezco sus campañas para una sociedad más justa con las otras especies, pero hay ciertas cosas que no se pueden ignorar.
Lo Malo de PETA
La principal polémica que PETA puede levantar es la de su manera de actuar. Es una organización, en teoría, con buenas causas, pero que termina llevando a la práctica acciones moralmente cuestionables.
La gran mayoría de sus anuncios y campañas se caracterizan por ser conflictivas, extremas, y con un alto contenido de desnudez. Su objetivo es escandalizar a la gente, y suelen seguir el lema el sexo vende. Es importante destacar, además, que esta desnudez suele tomar forma en cuerpos de mujer. Cuerpos 10, normalmente, y acompañados de mucha sensualidad. No son pocos los que se han quejado de que las imágenes de campaña usadas por PETA parecen tratar a las mujeres como objetos.
Otras tácticas cuestionables que llevan a la práctica es la de comprar acciones de empresas como McDonalds, justificándolo como una forma de presión, o el dar cómics bastante gráficos a niños pequeños (como el famoso Tu mama mata animales), sin importar el trauma o conflicto que puedan causar en la familia.
Por otro lado, me gustaría mencionar que PETA y su sello, a pesar de sus esfuerzos por propagar el movimiento Cruelty-Free, no son los más fiables. Su lista de productos que no han sido testados en animales responde a requisitos algo flojos. Así pues, muchas de las empresas que aparecen en su directorio venden sus productos en China (donde por ley se precisa el testado en animales en muchos productos), o pertenecen a compañías emparentadas que sí que experimentan con animales. Eso sí, mencionan estos casos en la propia lista.
Finalmente, y esto es lo más polémico, PETA parece seguir una lógica distinta en lo que conlleva a la compasión hacia a los animales. Aproximadamente el 90% de los animales que acogen en sus protectoras y reservas de animales, acaban siendo asesinados. La organización reivindica que es algo generoso el aliviar el sufrimiento de estos animales mediante la eutanasia.
De hecho, la presidenta de PETA, Ingrid Newkirk, ha mencionado en varias ocasiones que la organización lucha por un futuro en el que la gente no pueda tener animales de compañía. El deseo egoísta de poseer animales y de recibir amor de ellos les causa un sufrimiento inmedible, dice en su página web. Su visión de futuro, pues, incluye que tanto perros como gatos lleguen a la extinción total de manera natural.
Cuando uno descubre esto, es difícil no cuestionar cuales son los auténticos principios y motivaciones de la organización. Estoy segura de que no todos los que apoyan o trabajan con PETA comparten todos sus valores, pero es difícil saber hacia dónde va destinado tu esfuerzo o dinero cuando encuentras casos así.
Hay muchas maneras de hacer las cosas, y aunque PETA lucha por buenas causas (normalmente), no estoy segura de que su manera de hacer las cosas sea la más correcta.
¿Qué opináis vosotros?