Por la mañana en la playa, cuando el océano se retira sigiloso para dejar sitio para nuestras toallas, quedan los restos materiales que el agua no se quiere tragar.
Hace años recuerdo que abundaban las algas y los restos biológicos que el torbellino de las aguas había arrastrado a la arena.
Pero hace años también, que cada vez abundan más los residuos que los humanos desechamos, y como nos resistimos a concienciarnos de la importancia del problema, cada vez son más y más plásticos.
Como persona recicladora previsora, llevaba en mi mochila, entre toalla y cremas, mis queridas ” bolsas de rescate “. Bolsas de plástico para recoger los residuos que encuentro en mi camino, mayormente plásticos.
Mientras veía como los niños hacían castillitos, y los abuelos paseaban por la playa mojándose los pies, yo me entretuve en ir recogiendo los residuos de entre las algas, ( sobretodo, me esforcé más en retirar los residuos plásticos más pequeños, para evitar que los animales los confundan con comida y los ingieran).
Retire de todo, pajitas de plástico, gomas elásticas, mecheros, trozos de botella, y trozos de botellas de plastico.
Pero como podéis ver en las fotos había de todo en la arena.
Una cosa que me pareció curiosa y reconfortante a su vez, es que en un momento que estaba en la toalla, vi como una abuelita iba con una bolsa de plástico recogiendo los residuos grandes y vaciaba la bolsa en una de las papeleras de la playa. Algunos la tacharon de vieja loca, a mi me pareció adorable.
Dicen que si seguimos a este ritmo, dentro de unos años habrá más plásticos que peces en el mar. Y es muy triste, porque viendo lo que vi el otro día, me creo esos augurios.
La naturaleza expulsa del agua lo que no debería estar en ella, nuestros residuos. Pero le tiramos más residuos de los que ella puede expulsar.
Cuanta gente hay como yo que lleva una bolsita encima, y recoge residuos aunque no sean suyos?
Cuanta gente hace como aquella abuela, de recoger los residuos que encuentra a su paso mientras camina?
La respuesta es no mucha gente
No la suficiente.
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