Las nueces del lavado son fruto no solo del Sapindus Mukorossi sino también de varios otros de su mismo género.
Se han utilizado durante siglos como un jabón pero con el “avance” y la industrialización, su uso se ha echado de lado en el mundo occidental y en los últimos años han comenzado a retomarse como una opción más segura ante los detergentes químicos y abrasivos.
Pero, y ¿cómo es que lavan? ¿son mágicas?… ¡algo así! … Tienen la magia de la naturaleza en ellas, su cáscara es rica en una sustancia llamada saponina, un agente de limpieza que al estrujarla y al estar en contacto con el agua, produce una espuma que funciona como detergente, limpia y desinfecta. Y es que la naturaleza está equipada ¡con todo lo que necesitamos!
Dicen que también tienen múltiples usos medicinales, pero aún no las he probado de esa forma.
El usar estas nueces del jabón, en mi caso, comenzó más como una alternativa para un problema de salud con el punto extra de ser súper ecológicas. Desde hace muchos años uno de mis más recurrentes problemas de salud habían sido las alergias, afortunadamente, desde que cambié mis productos de cuidado personal y limpieza por opciones naturales, esas alergias se han ido (o al menos hasta la primavera).
Tengo que confesar que antes de comprarlas leí muchas reseñas de otros usuarios y vi vídeos donde mostraban su uso. Al ser algo natural pensé que sería una mejor opción para mi salud pero temía que quizás no limpiaran lo suficiente, por suerte, me llevé la grata sorpresa de que funcionan de mil maravillas, incluso remueven manchas.
Yo las he estado usando desde hace un año y ¡no las cambiaría por ningún detergente en el mundo!
Razones para utilizar nueces de lavado:
1. Fáciles de usar: coloca varias nueces en un saquito de tela o en un calcetín cerrado dentro de tu lavadora, también puedes hacer tu propio detergente líquido o en polvo.
2. 100% natural: vienen de la naturaleza sin ningún aditivo.
3. Sostenibles: renovables y fáciles de crecer de forma orgánica.
4. Respetuosas con el medio ambiente: requieren de menos recursos, menos embalaje, menos energía.
5. Biodegradables: no dañan el medio ambiente, no contaminan las aguas. De hecho, el agua se puede utilizar para el riego de las plantas.
6. Ahorran agua y energía: ya que son menos jabonosas, requieren menos agua para el enjuague, así que se puede utilizar un ciclo más corto, lo que se traduce en menos energía.
7. Económicas: pueden reemplazar muchos productos de limpieza y de cuidado personal y son extremadamente duraderas.
8. Reutilizables: cada baya o nuez se puede utilizar unas 5 veces antes de ser compostada.
9. Compostables: se pueden compostar después de usar.
10. Totalmente seguras: incluso para bebés, personas con alergias, problemas de piel y asma.
11. Naturalmente hipo alergénicas: no son tóxicas ni producen ningún tipo de irritación.
12. Inodoras: pero puedes agregar aceites esenciales para el aroma de tu preferencia.
13. No necesitas usar suavizante: ablandan naturalmente las telas.
14. Multiusos: se pueden utilizar de muchas maneras diferentes para limpieza, cuidado personal e incluso con las mascotas.
15. No es una nuez real: es seguro para personas con alergias a las nueces.
16. Suaves: no dañan los tejidos delicados y conservan los colores de la ropa.
Algunos otros usos:
Detergente líquido o en polvo.
Lava platos.
Se pueden poner en el lavavajillas.
Limpiador de usos múltiples.
Champú.
Jabón para cuerpo y cara.
Espuma de afeitar.
Champú para mascotas.
Limpia joyas (popular en Asia).
Limpia vidrios.
Contra piojos.
Insecticida suave para la huerta, como los pulgones.
Contra hongos y bacterias en los pies.
¿Conocías la nuez de lavado ¿sabes de algún otro uso?… y en caso de que no, ¿te gustaría probarlas?
Fuente: este post proviene de Little Big Actions, donde puedes consultar el contenido original.
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