Ha llegado el día menos deseado. Le han dicho a tu peque que no quieren jugar con él porque es negro y huele mal. Llega a casa desolado y, evidentemente, no comprende porqué le han tratado así. Toca parar el golpe y, en la medida de lo posible, restaurar el daño emocional que otre niñe ha causado. En este post te ofrezco tres tips rápidos para neutralizar comentarios racistas.
Reconoce sus emociones
Lo más importante es que tu peque sienta que entiendes su dolor. Las frases del estilo “no pasa nada” o “no te preocupes” son contraproducentes. Sí pasa. Le está pasando algo, y le preocupa. Le han insultado y se siente mal, y para él o ella va a ser muy importante que tú reconozcas su dolor. O imagina que tú tienes una bronca con tu jefe, una persona de tu confianza te dice que no le des importancia, que no pasa nada. ¿Cómo te sentirías?Dale espacio
Tal vez tu peque no quiera hablar del tema justo después de haberlo expresado. Respeta sus tiempos. El centro es tu peque. Si da muestras de no querer hablar del tema, dale ese espacio. Preguntarle algo del estilo de “¿quieres que hablemos de lo que ha pasado?”, te puede servir para sondear. Si te dice que sí, explora con ella o él, cómo se siente, deja espacio para que se exprese si lo necesita. Si te dice que no, hazle saber que puede acudir a ti cuando sienta que es el momento. Puedes decirle algo del estilo de “si más adelante te apetece que lo hablemos, solo tienes que decírmelo”, así sabrá que estarás disponible para escucharle.Tu peque no tiene el problema
Déjale claro esto cada vez que se presente una situación de este estilo, porque seguramente sentirá que hay algo en ella o él que está mal. “Quien tiene el problema es quien te insulta”. Esta frase me ha servido con mis hijas y por eso la comparto contigo. Es necesario que reforcemos el sentimiento de que nuestres peques no son “culpables”. Culpable es el sistema que nos discrimina.Por último, y no por ello menos importante, ahí va un bonus: no te centres en la persona que le agredió. Los insultos o las malas palabras no ayudan, por más que sea lo que, visceralmente, te apetezca hacer. Concéntrate en atender las necesidades de tu hija o hijo para asegurarte de que reduces el impacto del desasosiego que siente.
Estos y otros consejos para gestionar y minimizar el malestar que puede causar a nuestres peques una agresión verbal son los que voy a compartir durante el desarrollo del curso “Maternidades racializadas”, una formación en la que vamos a tratar sobre la raza en la crianza, enfoque necesario en el caso de familias multirraciales, y de otras cuestiones específicas relacionadas con el desarrollo de su identidad.
El taller durará cuatro sesiones y dará inicio el próximo lunes, día 7 de octubre. A lo largo de las sesiones trabajaremos cuestiones relacionados con la educación antirracista, que es la clave en el crecimiento y el desarrollo de la identidad de nuestres hijes, ya que incorporando esa perspectiva podremos reforzarles con herramientas que les permitirán gestionar el racismo estructural que enfrentamos las personas racializadas a diario.
Si te interesa poder compañar a tu peque desde esta ópitca, necesitas raciliazar tu crianza. Así podrás orientarle en su desarrollo desde la seguridad y la confianza. Y para que tu acompañamiento sea exitoso ofrezco la oportunidad de formarte asistiendo a este taller en el que hablaremos de estrategias para maternar racializada, consciente y respetuosamente.
El taller constará de cuatro sesiones en vivo y otros materiales de trabajo adicionales en otros formatos y te resultará útil si tus peques son afrodescendientes o de otro orígen étnico, independentemente de que tú lo seas o no. Tienes aquí el enlace con toda la información para que te apuntes. Te veo en el taller a partir del siete de octubre y, evidentemente, si te quedan dudas, estoy a tu entera disposición para resolverlas. Me encantará ayudarte.