La camiseta que queremos reciclar es esta. De color blanco roto, en un tejido similar a la gasa y de manga larga.
Vamos a darle una vuelta para que parezca un artículo totalmente diferente.
Como el tejido es muy ligero, el primer paso va a ser cortarle las mangas. Así tendremos una camiseta de verano muy básica y muy fresquita.
Cuando realicemos el corte, debemos tener un poco de cuidado y no cortar demasiado cerca de la costura. Dejaremos un margen de un centímetro mínimo, para luego poder rematarlo.
Como no tengo máquina de coser y tampoco tengo mucha idea de costura, me he decidido por un remate sencillo y rápido de hacer.
Simplemente enrollo la tela que me sobra (ese centímetro que hemos dejado de margen) y una vez enrollado, lo cosemos.
Yo he elegido un color a contraste para coserlo, pero si quieres que no se note, puede elegir un hilo más parecido al color de la tela.
Este es mi remate, fotografiado de cerca, para que te hagas una mejor idea de cómo queda.
Como la camiseta es blanca, le he querido dar un toque de color. No tengo pinturas específicas para pintar tela. Siempre he usado pintura acrílica para pintar pequeñas zonas y siempre me ha quedado bien. La pintura acrílica se mantiene, y resiste muy bien a la luz y a los lavados.
Como cada tela es un mundo, siempre aconsejo hacer una prueba en un trozo de tela (en este caso, he usado las mangas que he recortado). La pintamos, la dejamos secar, y después la lavamos. Si supera con éxito esta prueba, entonces pintamos la camiseta.
Eso si, cuando pintemos la camiseta, hay que poner algún trozo de papel o plástico, para que no traspase la pintura y nos quede toda la parte trasera manchada.
Este es el resultado final! Yo estoy encantada, me gusta mucho cómo ha quedado.
Búscame en las redes sociales:
O encuéntrame en mi web:
Blog "verde", anticonsumo, preocupado por el medio ambiente, el reciclaje y la sostenibilidad.