En Especies Extintas te ofrecemos toda la información sobre el dingo.
Cómo es el dingo: descripción
El dingo tiene comportamientos similares al de otras subespecies de lobos en el planeta.
Normalmente se establecen en manadas de 4 o más individuos, y se establecen en zonas no habitadas por humanos, como el sureste australiano Aunque se les ha visto merodear por sitios muy lejanos a sus hábitats.
A pesar de que tienen una apariencia similar a un perro, estos no ladran y en vez de ello, se reconocen por sus distintivos aullidos.
Principales comidas del dingo ¿Qué come?
La comida para el dingo es algo fundamental, no por ello tienen alguna dieta de específica, pueden comer literalmente lo que sea, desde insectos, grandes mamíferos, hasta comida casera (o desperdicios de esta).
Sin embargo en estado salvaje, el dingo se alimenta principalmente de pequeños mamíferos y otros no tan pequeños, entre estos:
El ualabí
Conejos europeos
Ratón común
Canguro rojo
Rata de orejas larga
Ualabís
Wombats
Walarú oriental
Pósums
Rata polvosa
Ganso urraca
Así mismo, cuando no encuentra alimento en su habitad este se dirige hasta fincas con ganado para comer ovejas o reses (razón por la cual es brutalmente cazado).
Reproducción ¿Cómo se reproduce?
Los dingos tienen un ciclo de reproducción muy corto durante el año, esto es algo que los separa de los perros y los acerca más a sus primogénitos los lobos.
Por lo cual solo se reproducen una vez al año durante el ciclo estral (periodo reproductivo) del dingo hembra, el cual dura aproximadamente dos meses.
Los dingos en cautiverio responden a sus instintos, por lo que suelen intentar escapar y así buscar una pareja para reproducirse.
Aunque hay que aclarar que el periodo reproductivo no es similar para especies puras o mezclas entre dingos y perros.
Ya que en la primera suelen respetar un ciclo reproductivo de una vez al año, mientras que los cruces de dingo pueden hacerlo dos veces al año.
Características del dingo australiano
Los dingos cuando han alcanzado por completo su crecimiento suelen medir entre 50 a 60 cm, dominando por el tamaño los machos, los cuales son más grandes que las hembras.
El dingo puede reconocerse por su pelaje de color amarillento aunque en algunos casos este puede variar entre más claro u oscuro.
En la actualidad el dingo australiano no se encuentra con gran frecuencia de forma pura, ya que se ha mezclado con perros llevados por los ingleses. Los pocos individuos puros que existen poseen las patas y pecho de color blanco.
La caza suele variar, ya que si se encuentran solos capturan presas de pequeña envergadura, pero en manadas son muy estratégicos y capturan a animales de gran tamaño, como canguros, búfalos o ganado.
Este canino además se le conoce por tener un comportamiento bastante amigable, inclusive adaptándose a tal punto para ser domesticados.
Hábitat del dingo ¿Dónde vive el dingo?
Los dingos habitan principalmente en el norte y centro de Australia, sin embargo estos en ocasiones dejan sus hábitats para ir busca de alimento, por lo cual se les ve rondar sitios habitados por humanos.
Recordemos que el dingo no es una especie propia de Australia, sin embargo lleva en este territorio unos 3500 mil años, cuando asiáticos introdujeron a este mediante viajes.
¿El dingo una mascota?
Algo que caracteriza a los dingos es el comportamiento hacia los humanos, no se sabe si es por las cruzas que se dieron entre esta especie y los perros.
Pero el dingo es receptivo a los humanos, tanto que en Australia los aborígenes lo domesticaron y en la actualidad esto se sigue realizando.
Cabe destacar que el comercio de los mismos es ilegal, pero no cabe duda de que su domesticación sea posible.
Dingo en peligro de extinción
El dingo ha sido declarado como una especie vulnerable a la extinción por la UICN.
¿Por qué? Causas de su peligro
Esto se debe principalmente dos razones, la primera ocurre unos cuantos años en el pasado y se debe a las especies de perros introducidas por los ingleses al territorio australiano, lo que terminó convirtiendo al dingo en hibrido debido a la reproducción con los otros.
Otra de las causas que afecta al dingo, es el hecho de que el humano ha quitado buena parte de su territorio para la cría de ganado, por lo que los dingos suelen atacar a las reses, razón por la cual los granjeros, cazan y envenenan a los dingos salvajes.