“La enfermedad es un conflicto entre la personalidad y el alma". -J Sebastian Bach.
Algunas veces... el resfrío "chorrea" cuando la persona reprime el llanto.
El dolor de garganta "tapona" cuando no es posible comunicar las aflicciones.
El estómago arde cuando las rabias se quedan estancadas .
La diabetes invade cuando la soledad duele.
El cuerpo engorda cuando la insatisfacción aprieta.
El dolor de cabeza deprime cuando las dudas aumentan.
El corazón afloja cuando el sentido de la vida parece terminar.
La alergia aparece cuando el perfeccionismo está intolerable.
Las uñas se quiebran cuando las defensas están amenazadas.
El pecho aprieta cuando el orgullo esclaviza.
La tensión sube cuando el miedo aprisiona.
Las neurosis paralizan cuando el niño interior tiraniza, como se lo hicieron a él.
La fiebre calienta cuando las defensas explotan las fronteras de la inmunidad.
Las rodillas duelen para doblegar el orgullo. El cáncer mata cuando cuesta perdonar y/o te cansas de "vivir", por el mismo agobio que produce el rencor.
¿Y tus dolores callados? ¿Cómo hablan en tu cuerpo?
La Enfermedad , te avisa que te estas equivocando de camino.
El camino a la felicidad es recto, sin embargo a veces tomamos curvas llamadas EQUIVOCACIONES, existen semáforos llamados AMIGOS, luces de precaución llamadas FAMILIA, y te ayudara en este camino el tener: Una rueda de repuesto llamada DECISIÓN, un potente motor llamado AMOR, un buen seguro llamado FE, abundante combustible llamado PACIENCIA, pero sobre todo un experto conductor llamado DIOS