En mi última visita a Oslo, tuve la oportunidad de visitar el Centro del Nobel de la Paz. La verdad es que me hacía mucha ilusión, y no me decepcionó para nada. No solo disfruté de las exposiciones, sino también de una joya escondida: la tienda del Centro.
Hablo muy seriamente cuando digo que la tienda del edificio es una exposición en sí misma. Está repleta de rinocerontes hechos a partir de objetos reciclados, de joyas africanas artesanales, de libretas ecológicas hechas a partir de excrementos de elefante, de libros sobre cómo cambiar el mundo, de paracaídas de los 40 transformados en bolsas de tela y de tazas de bambú.
Uno de mis descubrimientos fue un cúmulo de mochilas y pequeños neceseres reciclados, hechos a partir de telas y tejidos de la armada sueca de los años 30-40. El diseño me llamó la atención en seguida, y la idea detrás de la marca me cautivó.
Globe Hope: ¿Quiénes son?
Globe Hope es una compañía originaria de Finlandia que se dedica a diseñar y crear productos ecológicos a partir de materiales reciclados y desechados. A través del re-diseño y el re-cosido, materiales viejos y abandonados pasan a ser prendas de ropa, bolsas y accesorios nuevos y únicos, dicen sus trabajadores.
Me encanta la filosofía de upcycling que tiene la compañía, además del diseño de gran parte de sus productos (especialmente de aquellos que en otra vida fueron materiales de guerra). En el curso de moda sostenible que realicé hace poco con Gansos Salvajes, Laura Martínez decía que la prenda más sostenible es aquella que ya existe… algo en lo que Globe Hope saca matrícula de honor.
En la compañía afirman que se basan en tres valores principales: estética, ecología y ética, por lo que se aseguran personalmente de que la creación de cada objeto siga rigurosos principios sostenibles.
También son éticos los principios que sigue la compañía, ya que el equipo de Globe Hope está formado actualmente por 13 personas, basadas en Nummela, cerca de Helsinki. Allí es donde tiene lugar el diseño, el marketing, la creación de productos y joyas, el almacenamiento de los materiales y la administración de la tienda online.
Además de ser ecológicos y ayudar a nuestros clientes a comunicar sus valores ecológicos, nuestros productos también están diseñados para ser prácticos.
Upcycling: Imaginando un mundo mejor
Todo empezó cuando Seija Lukkala, emprendedora en el mundo de la moda durante 13 años, se dio cuenta de la gran cantidad de desperdicio generado por la industria textil. Con el deseo de contribuir a un desarrollo más sostenible y de crear piezas de ropa únicas e interesantes, fundó Globe Hope en el 2001.
Sencillamente quería ir en contracorriente de la moda desechable y del consumo masivo, dice en su página web. ¡Y así lo ha hecho! Su compañía es responsable de colecciones anuales destinadas a aquellos que valoran sistemas ecológicos, el desarrollo sostenible y una moda de calidad.
En una entrevista realizada en 2009, Seija decía que la ropa no es solo ropa, sino un conjunto de pensamientos e ideologías. Personalmente llevaría esta declaración un paso más allá y diría que, además, la ropa es capaz de contar historias y de formar parte de la propia historia.
Y es que los materiales utilizados en Globe Hope, por ejemplo, muestran una gran diversidad. Desde tejidos de la armada (uniformes, paracaídas, mochilas) hasta banderas, estandartes publicitarios, velas de barcos, cinturones de coches, cortinas, manteles e incluso sábanas viejas. La mayor parte de estos materiales proviene de Finlandia, pero algunos de los tejidos militares son originarios de Suecia y de Europa Central.
Globe Hope también recicla objetos como discos de vinilo rallados, cremalleras o teclas de ordenador, haciendo de ellos distintas joyas y accesorios. Como el propio logo de la compañía dice, el mundo no sufre por falta de material, sino por falta de espíritu. O de imaginación. O de juicio… ¡O de un poco de todo!
La cuestión es que en Globe Hope, Seija y compañía decidieron dejar volar su imaginación y apostar por una moda upcycling que pudiera contribuir, de una manera u otra, a un mundo más sostenible. Y así llevan 15 años, llenos de éxitos (uno de ellos es su bolsa Sifti, que lleva placas solares que te permiten recargar el teléfono) y anécdotas (¡una vez hicieron toda una colección de bolsas de tela a partir de un viejo globo aerostático!).
Productos con vida propia
En mi caso, me enamoré perdidamente de una pequeña cartera hecha a partir de material militar. Cuando lo examiné de cerca, pude leer en la etiqueta que anteriormente había sido una riñonera de la armada de los años 30. Destacaban en su característico color caqui unas palabras que se repetían constantemente: The world does not suffer from the lack of material but the lack of mind.
Des de el primer momento creí que era un neceser, más que una cartera, y así lo he estado utilizando. La verdad es que me ha sorprendido no solo la historia que tiene detrás, sino la calidad y resistencia del material.
En Globe Hope valoran las cualidades de los materiales que llegan a sus manos, por lo que intentan conservarlas todo lo posible. Los detalles originales de los productos los hacen más interesantes y cuentan la historia de cada material. Y como mi neceser/cartera, cada producto lleva una etiqueta con su propia historia.
Yo estoy encantada con esta marca y la idea de Seija. Si vuelvo a encontrarme con sus productos, estoy convencida de que los estudiaré con mucho interés.
¿Qué os parece Globe Hope? ¿Conocíais la marca de antes? ¿Sabéis de otras compañías que apuesten por el upcycling?