Las dietas, generalmente, conllevan a un cambio drástico en la forma de alimentarse que poseen los seres humanos, en consecuencia, pueden afectar considerablemente el buen funcionamiento del organismo. Sin embargo, todavía hay alternativas saludables que se adaptan a cualquier tipo de persona, tal es el caso de la dieta evolutiva.Esta nueva forma de ingerir alimentos trae múltiples beneficios no sólo para el individuo común, sino para aquellos que sufran de alguna condición específica como la diabetes. Si la padeces, es porque tu cuerpo no tiene la capacidad de aprovechar o de producir la insulina de manera óptima.
Es conocido que existen dos tipos de diabetes, la tipo 1 que requiere de mayor atención en cuanto a la alimentación se refiere, debido a que no se produce la insulina necesaria para el cuerpo; y la tipo 2, que es aquella en la que se presenta resistencia a la insulina o una pequeña deficiencia en cuanto a su producción.
Si posees esta condición, independientemente del tipo, esta dieta balanceada será un alivio para tu cuerpo, pues te mantendrá lleno de todos los nutrientes necesarios de manera totalmente natural. Recuerda que los cambios surten mejor efecto si se hacen gradualmente, porque así le permites al cuerpo reconocer la nueva dinámica de alimentación.
En este sentido, si eres diabético y quieres iniciarte en la dieta evolutiva, hazlo de forma paulatina. La principal razón de esta sugerencia, es que los cambios bruscos en los pacientes diabéticos pueden ser contraproducentes y provocar daños a nivel físico. Entonces, realiza los cambios poco a poco y conseguirás excelentes resultados sin alterar el orden normal de tu organismo.
¿Cómo deben ser las porciones de comida?
Una vez que conozcas los primeros pasos a seguir, lo siguiente en la lista es estar al tanto de cuáles son los alimentos que debes consumir, la regularidad para hacerlo y algunos consejos que puedan adaptarse a tu forma de vida. En esta dieta evolutiva no hay excusas que valgan para no llevarla a cabo, pues es muy sencilla y puede personalizarse de acuerdo a tus metas.
La clave principal durante el desarrollo de esta dieta, es saber que un 80-90% de lo que ingieras debe estar constituido por frutas o verduras crudas, mientras que el otro porcentaje restante lo conforman aquellos complementos que nuestro cuerpo desee. Originalmente, no se permite el consumo de carnes, huevos, lácteos y demás, pero si deseas puedes flexibilizar esa regla.
Lo más importante de todo, es mantener la alimentación lo más balanceada posible, evitando azúcares refinadas, harinas, entre otros. Finalmente, en cuanto a porcentajes se refiere, los alimentos en tus comidas deben estar constituidos por:
Frutas crudas: 50%
Semillas crudas: 10%
Vegetales: 30%
Al menos 2 litros de agua al día
Alimentos ideales para el diabético
Un consejo valioso para el diabético, es mantener controlada la cantidad de azúcar en sangre, es decir, la glucemia, y una excelente forma de hacerlo es mediante las comidas. No es necesario consumir azúcares refinadas debido a que alteran los valores recomendados, en cambio, ellas se pueden sustituir por el azúcar natural que contienen todas las frutas.
En cuanto a los mejores alimentos para las personas con esta condición, se destacan aquellos que son altos en calcio, potasio, fibra, magnesio y vitaminas A,C y E. Una vez que tomes en cuenta ese dato, puedes proceder a planificar tus comidas diarias de manera más saludable.
Entre las mejores recomendaciones para ti, se destacan:
Menestras: es un guiso característico de España, elaborado con diferentes verduras. Su aporte para tu cuerpo se encuentra en la cantidad de fibra que posee, pues brinda una gran parte de tu requisito diario de fibra, sumado a que son altas en potasio y magnesio.
Hortalizas: entre las más beneficiosas están la espinaca y la col ya sea silvestre o rizada. Lo bueno de ellas, es que poseen pocos carbohidratos y calorías, por lo que se pueden consumir en mayores cantidades que otras.
Tomates: aporta muchas vitaminas, sin importan la forma en la que los consumas, pues son saltos en vitamina C y E, aparte de contar con cantidades importantes de hierro.
Estos son algunos de los alimentos que puedes consumir durante el desarrollo de la dieta evolutiva, los cuales te mantendrán enérgico y saludable. Puedes incorporar igualmente frutos secos, granos y algunos cítricos.
Algunos consejos
Por último, aquí hay algunos aspectos que debes recordar si eres un paciente diabético, ya que te ayudarán a mantener tus valores físicos más equilibrados.
Eliminar o reducir el consumo de alimentos altos en azúcar
Ingerir pocas grasas
Reducir el uso de las sales
Comer pequeñas porciones de alimentos como frutas o verduras a lo largo del día
Consumir poco alcohol
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