Como cultivo de interior y en maceta crece casi en cualquier parte. Necesita calor, humedad y no gusta del sol directo. Se multiplica por rizomas, por lo que podemos usar una parte del jengibre que tengamos en casa, simplemente ponerlo en una maceta, regar, dar amor y esperar para cosechar.
Conviene que se plante en primavera y hay que asegurarse que el tubérculo madre sea lo más fresco posible.
Preparamos una maceta con buen drenaje y tierra preparada con una parte de arena, una parte de compost madura y una parte de tierra. En el centro ponemos el jengibre con los rizomas hacia arriba.
Preparación del rizoma
Muy importante para plantar jengibre es preparar el rizoma. Ponemos la raíz en agua durante la noche y luego la cortamos en trozos no muy pequeños. Nos aseguramos de que cada segmento tiene al menos un par de bultos pequeños, que son las yemas de las que crecerán nuestras nuevas plantas.Plantar jengibre
El siguiente paso para plantar jengibre en casa es preparar el sustrato. Llenamos una maceta de unos 30 centímetros de profundidad con una mezcla de tierra y compost. Un recipiente de buen tamaño nos da como para poner de 2 a 3 trozos. Presionamos los rizomas en la tierra a poca profundidad para cubrirlos con un poco tierra. Ponemos las macetas en un lugar sombreado.Cuidado y crecimiento
Al principio empezamos con poco riego, y luego lo aumentamos cuando la planta comience a brotar. Al jengibre le gusta la humedad y el calor. Por eso es importante mantener el suelo húmedo, pero no empapado, y en temperaturas de al menos 20 grados. En el primer año, deben llegar a un tamaño de entre 40 a 80 centímetros de altura.Cosecha
Una vez que las plantas ya tienen un buen tamaño, podemos ir cosechando la raíz de a poco y la planta seguirá creciendo. De esta forma, si hacemos dos o tres macetas, al cabo de un tiempo tendremos siempre jengibre fresco a nuestra disposición.Riego, cuidados y cosecha del jengibre
El jengibre se debe regar a diario, para garantizar que la tierra quede húmeda pero sin encharcar. En un mes deberíamos tener tallos y hojas.La planta rara vez florece y no da frutos. Cosecharemos en un periodo de 8 o 10 meses, cuando la planta empiece a secar. Dejaremos de regar, y cuando la planta ya esté seca. Una parte de la raíz con rizomas la plantamos nuevamente, para la próxima cosecha, como hacen los cultivadores tradicionales de India.
Conservar la raíz una vez cosechada
Luego de plantar jengibre, una de las mejores y más simples formas de conservarlo, con la que conseguiremos que nos el trozo de jengibre nos dure más de tres semana, es guardado en la nevera dentro de una bolsa, preferiblemente de esas que se utilizan para congelar alimentos, que llevan cierre zip. Es importante quitar bien el aire.Otra opción es congelarlo directamente, dura cerca de un año, pero la textura al descongelarlo no es la más óptima.
Si nos sobra jengibre y está pelado, lo podemos conservar usando vodka. Queda muy rico luego, por ejemplo, sobre el sushi.
Ahora bien, si tenemos la planta en una maceta lo mejor es dejar la raíz en la tierra e ir quitando lo que necesitamos cada vez.
Animaros con el jengibre. Es rico, fácil de cultivar y como vimos al comienzo del artículo, con muchos beneficios y propiedades para la salud.
¿Por qué plantar jengibre?
Plantar jengibre en macetas en casa es una excelente manera de tener siempre disponible esta raíz que nos ayudará además de a preparar excelentes platos, a mejorar nuestra salud. Entre los beneficios se encuentran que este rizoma puede ayudar a curar la piel irritada, a ayudarnos a lucir más jóvenes, a tener una mejor digestión, a reducir las náuseas, a reducir el colesterol malo, a prevenir enfermedades cardiovasculares, a estimular el sistema inmune y a aliviar los dolores menstruales.Además, el té de jengibre es ideal para tratar afecciones de garganta. ¿Tienes experiencia plantando este rizoma en casa? ¡Cuéntanosla!
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