¿Qué necesitamos? para unos 3 o 4 recipientes:
90 g de manteca de karité.
60 g de manteca de cacao.
4 cucharadas de almidón de maíz (maicena).
4 cucharadas de bicarbonato.
60 gotas de aceites esenciales (15 de cada): aceite esencial de hierbalimón (citronela), ylang-ylang III, lima y lavanda.
¿Cómo se hace?
Antes de nada pulverizar con alcohol los materiales que vayamos a utilizar para desinfectarlos.
2. Fundir las mantecas al baño maría y cuando estén disueltas tamizar el almidón (para que no se formen grumos) y añadirle el bicarbonato.
3. Dejar que se enfríe y cuando esté a temperatura ambiente agregarle los aceites esenciales. Remover y verter en los recipientes (nosotras hemos reutilizado algunos que teníamos de cremas).
4. Meter en el frigorífico unos minutos hasta que solidifique. ¡Ya lo tienes listo!
Es súper fácil de hacerlo y la textura es muy suave y cremosa.
Los aceites esenciales que le hemos añadido, a parte de tener propiedades desodorizantes, huelen a fresco y limpio, ideal para un desodorante. La manteca de karité y de cacao nos aportará muchísima hidratación. El almidón de maíz absorberá la humedad de la zona y por último el bicarbonato eliminará el mal olor y equilibrará el ph.
Esta crema también resultará ideal para los pies, porque aparte de eliminar los malos olores nos reparará los talones agrietados y ablandará las durezas.