Se sabe que en una palada de tierra hay un laboratorio químico imposible de ser imitado por ningún científico, ni siquiera se le llega a parecer, por ejemplo, en el suelo hay bacterias que fijan el nitrógeno del aire y lo convierten en proteínas para las plantas y finalmente para los hombres, también hay hongos unicelulares que transforman el azúcar en alcohol y en anhídrido carbónico, la lombriz también ayuda a mejorar el estado del suelo generando gran carga de macronutrientes, nitrógeno, fósforo, hierro, potasio y azufre.
Básicamente en el suelo distinguimos tres partes, las capas del suelo, las plantas y los animales.
En esta imagen se puede ver los distintos elementos que componen el suelo.
1 Hierbas: son las que aprovechan las capas fértiles de suelo.
2 Hongos: ayudan a descomponer la materia orgánica.
3 Consuelda y acedera: estas plantas sacan su alimento del subsuelo.
4 Trébol: con sus nódulos de las raíces fijan el nitrógeno al suelo.
5 Insectos: polinizan las flores y descomponen la materia orgánica.
6 Criaturas muertas: se descomponen y vuelven al suelo.
7 Lombrices y larvas: Entierran la materia orgánica en el suelo.
8 Animales minadores: Rompen y airean el suelo, se alimentan de insectos y larvas.
9 Capa superficial: proporciona nutrientes a las plantas, procedente de materia orgánica en descomposición o del humus.
10 Subsuelo: Proporciona minerales a las plantas, una parte proviene del lavado pluvial y otra de la roca madre.
11 Roca madre: Forma la base de todos los suelos.
Estos elementos generan el ciclo vital del suelo, si falta alguno de ellos el suelo tendrá carencias, actualmente la gran mayoría de agricultores usa abonos, fungicidas, plaguicidas, herbicidas, siempre o casi siempre son químicos sintetizados, al hacer uso de estos productos se destruye este ciclo tan importante que dota al suelo de sus propiedades, imagina que en tu huerto o explotación agrícola hay una plaga de pulgón y suministras el producto que te vendieron en cualquier almacén agrícola, seguramente te venderán un producto que termina con la plaga de pulgón que te esta mermando la producción, pero también terminara con la gran mayoría de insectos, de los cuales también viven algunos animales, esto favorece a otras futuras plagas porque has eliminado sus depredadores naturales, creando un circulo vicioso que te hará depender de esos productos químicos gastando cada vez mas dinero en fertilizantes, plaguicidas, herbicidas, fungicidas ya que estás eliminando uno o varios escalones en el ciclo vital del suelo, el uso de éstos productos químicos también puede contaminar los acuíferos subterráneos y afectar directa o indirectamente a las personas. Actualmente los estudios han demostrado que con una agricultura respetuosa con este ciclo vital se mejora el rendimiento de las explotaciones, como plaguicidas por ejemplo, se usan otros insectos, arañas y mariquitas por ejemplo, se están usando cada día más para combatir el pulgón, cochinilla, ácaros, etc, con unos resultados mas que satisfactorios en las explotaciones agrícolas, mejorando la calidad de el producto final ya que no contienen ningún químico que pueda resultar peligroso para el consumo humano, también se mejora el rendimiento de las explotaciones debido a que se gasta menos dinero en abonos o herbicidas, otro punto es el valor añadido que adquieren estos productos finales aumentando así su valor comercial, y por ultimo la satisfacción que genera estar en armonía con el medio que te rodea, dejando una huella lo mas pequeña posible en la naturaleza.
Hay ocasiones donde el suelo es muy pobre en nutrientes, este problema lo tenemos en alguna zona de nuestra plantación de Aloe Vera, para mejorar estas zonas con déficit de nutrientes añadimos estiércol que recogemos de un pastor vecino, también añadimos un manto de materia orgánica que generamos al cortar las hierbas adventicias (malas hierbas), y por ultimo en el sistema de riego añadiremos abono liquido echo por nosotros mismos con el estiércol de las cabritas del vecino, con esto se podrán mejorar notablemente los nutrientes del suelo, el rendimiento de la plantación y la calidad del producto en nuestro caso el Aloe Vera.
Mejorar las condiciones de un suelo pobre no es cosa de un día, es un trabajo largo, depende también de las condiciones de cada suelo y el uso que le demos, hay que usar siempre que se pueda la rotación de cultivos y los cultivos asociativos entre otras muchas técnicas que ya existen para respetar al máximo el medio ambiente y además como ya hemos dicho mejoraremos el rendimiento de los cultivos, hay suelos muy fértiles que no necesitarán de ninguna aportación de materia orgánica pero es posible que necesiten mejorar la fauna para evitar plagas en la medida de lo posible, y existen suelos muy castigados con químicos durante mucho tiempo y se necesitara mas trabajo para devolver el ciclo vital del suelo, este ciclo es natural y funciona solo, es tan importante como el ciclo del agua que todo el mundo conoce y sabe de su importancia para la vida en la tierra.
Desde Aloe de Sorbas intentaremos no afectar a este ciclo del suelo tan importante para desarrollar una agricultura sostenible, respetando así el medio ambiente, produciendo un Aloe Vera de la mayor calidad posible y dejando un lugar mejor para las próximas generaciones.
Poco a poco con esta serie de artículos intentaremos ir desgranando todos los puntos que intervienen en la agricultura sostenible.
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