Había una vez una marca de agua embotellada llamada FIJI WATER, un día hicieron una gran campaña publicitaria que decía: “FIJI WATER, porque no es envasada en Cleveland”.
Obviamente, a la ciudad de Cleveland no le hizo mucha gracia y decidieron probar su agua de grifo versus la marca FIJI WATER, demostrando así que el agua de la ciudad era de calidad superior.
Pero esto no se trata sobre una marca en particular y una ciudad, es una historia REAL, que nos demuestra cómo las industrias pueden ser tontas, inescrupulosas y que solo les importa el dinero.
¿Qué es lo que están haciendo?
Están haciendo todo lo posible porque compremos sus productos. Básicamente, se crearon una demanda.
No hay demanda = no hay ventas
Alta demanda = muchas ventas
Con una simple fórmula, asustando y engañando a la gente con historias sobre el agua de grifo, así como hicieron los de FIJI WATER. Porque sino, no tendrían otra forma de que la gente les comprara un producto al que pueden tener acceso de forma casi gratuita.
Y claro, también está el detalle de la publicidad. Utilizan fotos de montañas con manantiales, sin importar si el agua realmente viene de ahí o no. Y la mayoría de la gente se lo cree, eso es la publicidad.
Calidad
A veces el agua embotellada puede que sea más limpia que el agua de grifo, pero no siempre es así. De hecho, el agua embotellada está mucho menos regulada que el agua de grifo. En algunas marcas se han conseguido niveles de arsénico, si no lo sabías, el arsénico es una de las 10 sustancias químicas que la OMS considera más preocupante para la salud pública.
Sabor
Según recientes pruebas de sabor realizada en Estados Unidos, la gente eligió el agua de grifo por encima del agua embotellada.
Pero sin importar el resultado, hay que pensar como nuestros gustos pueden ser amoldados por la publicidad. David y yo, a veces ponemos en práctica una especie de juego: buscamos un producto en 3 marcas diferentes y hacemos la prueba a ciegas con los ojos vendados (incluso funciona con verduras de supermercado). Es bastante útil para darte cuenta si tu paladar puede diferenciar claramente entre marcas con distintos rangos de precio.
Costo
Comprar agua embotellada cuesta unas 3.000 veces más que el agua de grifo. Alrededor del 45% del agua embotellada (agua purificada) viene de los mismos sitios que nuestra agua de grifo, que como dije antes, es casi gratis.
Contaminación
La industria del agua embotellada es altamente contaminante. Se necesitan millones de barriles de petróleo para producir los millones de toneladas de PET (Tereftalato de polietileno) utilizados para fabricar las botellas plásticas. Más, todo el combustible que se necesita para exportar el agua embotellada alrededor del mundo.
El problema ambiental
Además de lo contaminante que es la industria del agua embotellada, también tiene un gran impacto ambiental sobre el planeta. Quiero poner como claro ejemplo a Nestlé Waters, que bombea su agua del Bosque Nacional de San Bernardino, California. Desde el 1988 Nestlé tiene vencido su permiso y sin embargo, continúan extrayendo decenas de millones de galones de agua por año. Es bien sabido cómo el estado de California sufre de grandes sequías y se le pide constantemente a sus ciudadanos el máximo ahorro de agua. No solo nos afecta a nosotros sino al resto de los seres vivos, y prueba de ello es cómo el número de algunas especies ha decaído considerablemente por problemas relacionados a falta de agua y comida y sin embargo, ¡Nestlé sigue sacando agua de allí! dañando nuestros ecosistemas mientras hace de ello un negocio.
En palabras simples, Nestlé bombea anualmente 705 millones de galones de agua pública de una zona que sufre de sequía, para ser revendida (en botellas plásticas altamente contaminantes) y además de todo, le paga al estado míseros 524$ anuales. ¡¿Cómo es posible?!
El agua es un derecho humano, no un producto corporativo
Millones de personas en este mundo, no tienen acceso a agua limpia. Cada minuto, un niño muere a causa de enfermedades relacionadas con el agua.
Agua de grifo
Sí, en muchos sitios alrededor del mundo el agua de grifo está contaminada, pero es culpa de industrias como esta, y por supuesto, la solución que ellos tienen es que ¡compremos su agua!
¿Qué podemos hacer?
1. No compres agua embotellada a menos que agua de tu localidad sea realmente insalubre.
2. Acostúmbrate al sabor del agua de grifo y lleva siempre contigo botellas reusables, yo siempre recomiendo las de acero inoxidable.
3. Apoya e invierte en el mejoramiento de sistemas de agua.
4. Evita la contaminación.
5. Pídele a las autoridades de tu ciudad por fuentes de agua. ¡Es tu derecho!
6. Riega la voz e involúcrate tanto como puedas.
Y, si en verdad necesitas comprar agua embotellada, procura aplicar las 3R:
Reduce su consumo.
Reusa y recicla las botellas.
Recuerda también que existen muchos filtros y purificadores de agua disponibles en el mercado.
¿Por qué es importante tomar acción?
Por tu salud, por tu bolsillo, y ¡por el planeta!
Yo propongo algo… ¿qué tal si a partir de hoy ya no vuelves a comprar agua embotellada?, hoy es un buen día para comenzar a hacer uso de esa botellita reusable que todos tenemos, la que tienes guardada en la despensa esperando a que la saques de paseo. Créeme, es ¡muy práctico! y te ayudará a crear el hábito de beber más agua.
Y ya para cerrar, te dejo con esto: en 2013, un emprendedor en China comenzó a vender latas de “aire fresco”. En sólo 10 días hizo una fortuna. El aire enlatado ¡NO es la solución a la contaminación!
La verdadera solución vendrá con la toma de acción, exigiendo a los gobiernos que tomen responsabilidad y cambien las leyes.
Y tú… ¿qué piensas del agua embotellada? ¿tines el hábito de comprar agua o bebes agua de grifo?
Fuente: este post proviene de Little Big Actions, donde puedes consultar el contenido original.
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