En general conocemos cuatro formas básicas en las que se presenta el incienso: varitas, cilindros, conos o granel, ahora te explicaremos la diferencia de cada uno de éstos, para que sepas cual te conviene más para tu próxima compra.
El incienso a granel, es el más antiguo, se puede combinar con otras hierbas y especias y es más fácil de usar, ya que luego se puede quemar directamente en una fuente de calor, si es carbón vegetal, mejor. El mayor problema es que se desperdicia mucho, y también si lo utilizas con frecuencia, puede dejar rastros de humo en tu casa (cortinas, techos, etc). Pero también es muy versatil, ya que al poder mezclarlo con hierbas o especias podrás lograr infinidad de combinaciones aromáticas.
El incienso en conos es muy conocido, sobre todo en esas cajitas pequeñitas donde lo encontramos a veces. Es práctico porque se quema por si sólo, no se necesita carbón como en el a granel. Es fácil de usar, muy económico y menos sucio. Aunque a veces sucede que depende de como esté hecho o con qué, suele no arder tan facilmente...me ha pasado :/
Las barritas cilindricas son con características similares al cono, ya que se fabrican de manera muy parecida y con practicamente los mismos ingredientes. Al ser más grandes duran más y mantienen un ritmo mejor y más constante. La desventaja es que al ser difíciles de moldear, son frágiles y a veces se caen parte de los componentes.
Y las varitas, más conocida por éstos lados, son muy económicas y fáciles de utilizar, también tiene la ventaja que puedes apagarla a medias, y luego volver a encenderla, si ya ha logrado esparcir su aroma y piensas que es suficiente, o si has encendido una y justo debes marcharte... El proceso de fabricación es laborioso, por lo que a veces, al secarse puede perder algo de su aroma...
Bueno, espero que os haya gustado éste post, yo ahora me voy a encender un incienso, para empezar mejor y más distendida el finde, un saludo!
Imágenes: Flickr¡Gracias por visitarme! Un abrazo Silvina