Me encanta la promesa de los comienzos que traen las nuevas lunas, pero tengo mucha energía que ha estado guardando y dando vueltas y estoy lista para lanzarla la próxima semana.
Cuando comencé a aprender sobre la magia lunar, escuchar la palabra "ritual" solía intimidarme. Sentí que los rituales eran estas grandes ceremonias realizadas solo por veteranas brujas, como se veía en algunas películas, o leía en algún libro.
Pero luego aprendí que los rituales no tienen que ser elaborados ni en plan película de terror. Pueden ser bastante simples, en realidad lo que más importa es que ... ¡sean siempre sagrados e importantes para ti!
De hecho, no tengo un solo ritual de luna llena. Elijo alguno que he usado en el pasado, dependiendo de mi estado de ánimo. Puede leer acerca de ellos aquí, que ya he hablado de ellos en en mi blog, si es tu primera vez por aquí.
A veces, el único ritual que realizo durante la luna llena es colocar mis cristales para bañarlos a la luz de la luna. Creo que podrías decir que es mi ritual de "luna llena" perezoso ... pero todos tenemos esos días, ¿no? También lo que hago, es realizar caminatas bajo la luna, porque me gusta muchísimo mirarla, es como que me hipnotiza y entonces, aprovecho la excusa para pasear a mi perra, esas noches especiales y poder contemplarla y sentir su energía ;)
Ya sea que realices o no un ritual, te aconsejo que siempre use el tiempo que hay luna llena para pasar al menos unos momentos pensando y meditando en aquellas cosas que te funcionan y aquellas otras que ya no.
Si algo no funciona, plantéate: ¿estás lista para liberarlo? Por lo general, en mi caso, si no puedo encontrar la motivación para liberarme a través del ritual, entonces todavía no estoy lista para dejarlo ir.
Me siento con esos sentimientos por un tiempo y los vuelvo a examinar en la próxima luna llena.
Entonces, me gustaría ahora que tú me cuentes ¿cómo usarás el poder de la luna llena la próxima semana?
Respóndeme y deja tu comentario, me encantaría escuchar tus pensamientos. :)
Fuente: este post proviene de Una Mamá Holística, donde puedes consultar el contenido original.
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